Rubalcaba y Ares acuerdan intensificar la vigilancia sobre las listas de Bildu
El ministro enfatiza que pondrán "dos lupas" sobre la coalición 'abertzale'
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, mantuvo este sábado una reunión en Erandio (Vizcaya) con su homólogo vasco, Rodolfo Ares, para analizar los mecanismos de coordinación entre ambos departamentos en la tarea de evitar que personas ligadas a la izquierda abertzale ilegalizada concurran a las elecciones de mayo a través de formaciones como la coalición Bildu. Esta cita se produjo pocas horas antes de que decenas de miles de personas se manifestasen en Madrid en apoyo de las victimas y para que ETA esté "fuera de las elecciones".
Hace unos días, Rubalcaba aseguró que observarían "con lupa" las listas de la coalición (EA, Alternatiba e independientes). Este sábado amplió la metáfora: "Lo que hemos hecho ha sido ponerle otra lupa. Vamos a ponerles dos lupas que van a trabajar de manera coordinada".
"Se trata de impedir que nadie pueda burlar la ley", explicó el vicepresidente tras la reunión, a la que también asistieron los respectivos números dos, Antonio Camacho y Rafael Iturriaga, junto a otros responsables de los dos departamentos. Rubalcaba recordó que el ministerio ya ha recibido un oficio de la fiscalía en que alertaba de la posible presencia de formaciones ilegalizadas en las elecciones. "Esto nos obliga a estar atentos", abundó.
Con respecto a ETA, el ministro reiteró que la banda terrorista está "al principio del fin". Menor actividad de la kale borroka, ausencia en los últimos meses de cartas de extorsión y menor presencia, "gracias al Gobierno vasco" de apoyos a ETA en las calles de Euskadi fueron algunos de los ejemplos que citó.
Con todo, el ministro instó a no bajar la guardia con la banda terrorista, toda vez que ni ha anunciado el cese definitivo de la violencia ni ha dejado las armas. "ETA no ha cerrado las puertas definitivamente y nosotros tampoco lo hemos hecho", recalcó.
Ares y Rubalcaba abordaron también en la cita la situación de las escoltas a amenazados, en plena polémica por la reducción de la protección a una decena de magistrados vascos. Pese a que el consejero no quiso entrar en demasiadas precisiones por razones de seguridad, recalcó que se seguirán manteniendo las escoltas "a aquellas personas que los técnicos consideren que es necesario mantener, con el operativo que también los técnicos consideren necesario".
En la reunión se analizó igualmente, la política antiterrorista y la necesidad de reforzar la colaboración entre los cuerpos policiales del Estado. Colaboración que posibilitó que hace casi dos semanas cuatro cuerpos policiales (Ertzaintza, Mossos, Policía Nacional y Guardia Civil) detuviesen en una operación sin precedentes a la banda de atracadores más buscada de España.
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