Rajoy: "Por un error, Trillo no debe dejar la política"
"Los ahorros están garantizados; pase lo que pase, hay que confiar", asegura
El segundo Tengo una pregunta para usted de TVE para el líder la oposición fue un programa centrado en la crisis, como el de que hace unas pocas semanas sometió al presidente del Gobierno a una catarata de críticas, y Mariano Rajoy se movió bastante cómodo defendiendo sus alternativas económicas centradas en la bajada de impuestos. Además, se concentró en mostrar cercanía y conocimiento de la realidad de casi todos los pueblos de origen de los que hablaban, y lo logró con ejemplos tan detallados que sólo alguien con la memoria y la capacidad de estudio de un opositor nato como Rajoy puede recordar.
Pero como se temían los estrategas del PP, que habían preparado hasta 300 preguntas difíciles para evitar sorpresas, el líder de la oposición lo pasó mucho peor cuando los 100 invitados tocaron cuestiones internas.
"Es que yo no puedo decir quién espió en la Comunidad de Madrid"
"Aquí no puede venir todo el que quiera", le contestó a un 'sin papeles'
Manuel Gallo, director de una oficina de seguros, le preguntó por el espionaje y el Yak-42. ¿Cree que mirar hacia otro lado beneficia su credibilidad? ¿Tan difícil es pedir perdón a los familiares del Yak-42 y asumir la responsabilidad política?, preguntó.
Rajoy esquivó primero el caso del espionaje. "Yo no puedo decir quién espió, no puedo acusar sin pruebas", insistió el líder del PP. Pero luego lo pasó aún peor, al hablar de Federico Trillo, uno de sus hombres de máxima confianza, responsable de Justicia.
"Trillo pidió perdón entonces, fue una situación terrible. Yo pido perdón ahora", trató de esquivar.
"¿Trillo no debería haber dimitido hace tiempo y retirarse de la vida política?", le espetó el ciudadano.
"Trillo no es ministro de Defensa. No tengo elemento de juicio que diga que Trillo ha tenido una responsabilidad en los fallos que se hayan podido producir", trató de zanjar, visiblemente molesto por el asunto.
"Penal desde luego no, política, hablo de responsabilidad política", le cortó el invitado.
"Penal desde luego no. Trillo no es ministro de Defensa, es diputado. Por un error una persona puede dejar su cargo, pero no por eso va a quedar inhabilitado por los siglos de los siglos para dedicarse a la política. Yo no lo creo así".
"Yo creo que sí", cerró el ciudadano.
Froilán, otro invitado, le preguntó también por la corrupción del PP. "En una casa cuando hay mal olor se abren las ventanas. ¿Por qué ustedes no lo hacen?
"Todas las personas deben observar comportamientos éticos, los políticos con mayor razón porque manejamos dinero público. Pero hay que andar con mucho cuidado. Es letal castigar a una persona sin pruebas. Yo he conocido a muchos políticos en mi vida, del PP, del PSOE y de IU, y la mayoría son gente honrada", contestó Rajoy.
"Ya, pero la mujer del césar no tiene que serlo sino parecerlo", insistió el ciudadano.
"Mire, yo me senté en un banquillo acusado de malversación, o sea de robar, cuando era presidente de la diputación de Pontevedra. Todo porque unas personas contratadas en un hospital no les habían pagado. Quedó en nada, pero hay que andar con mucho cuidado".
Antonio, un encargado de obra, le preguntó por qué no remonta en las encuestas. "Hay un Gobierno desbordado, usted sigue empatado en las encuestas. ¿Qué conclusión saca?"
"Las encuestas no son la verdad absoluta. Hace poco se han celebrado elecciones en Galicia y ninguna encuesta le daba al PP 38 escaños. No siempre aciertan".
Sara, otra invitada, le preguntó si quería ganar por aburrimiento o por un milagro.
"Por ninguna de las dos cosas. Para que la oposición gane, el Gobierno tiene que hacer las cosas mal, y nosotros hacer propuestas alternativas".
Rajoy, tan duro siempre con la inmigración irregular, tuvo que responder a Eric, un camerunés sin papeles con cuatro hijos que en cuatro años nunca ha trabajado legalmente en España: "Siempre trabajo en lo que me sale sin ningún derecho. ¿Qué hará por emigrantes como nosotros?".
"Usted por el solo hecho de estar en España tiene muchos derechos: sanidad, educación, servicios sociales", le contestó Rajoy. "España no es un país donde todo el mundo puede venir sin más. No se rinda, siga buscando trabajo, es un hombre joven, no puede arrojar la toalla. La situación va a mejorar en el futuro. Pero aquí no puede venir todo el que quiera", cerró el líder del PP.
Y Emilio, un ferroviario, recuperó el 11-M. "¿Descarta ya a ETA de la autoría del 11-M?". Hace dos años, cuando triunfaba en el PP la teoría de la conspiración, ante la misma pregunta, dijo "Yo no sé si ETA está detrás del atentado". Ayer cambió. "Ha habido un juicio y no han dicho que fuera ETA. Yo creo hoy que no fue ETA".
Rajoy, que evitó ayer las críticas al Gobierno, quiso también ofrecer imagen de hombre de Estado, tranquilo. María, una administrativa, le preguntó: "¿Están seguros nuestros ahorros o volvemos al colchón?". "Sí, pase lo que pase. Es una decisión que adoptó el Congreso de los Diputados. Están garantizados. Mire, yo fui informado de lo de Caja Castilla La Mancha. Hay que confiar, pero si ocurriera algo hay que decirle a la gente lo que pasa, ser transparente. No pasa nada por decir la verdad. Puede haber fusiones, pero necesitamos ideas claras y sobre todo pactado con la oposición. Tranquilos, los ahorros están garantizados", sentenció, en un tono muy distinto al dramatismo de su responsable económico, Cristóbal Montoro.
Varios ciudadanos le preguntaron por qué no pacta con el Gobierno para resolver la crisis. Y él volvió a ese papel de moderado. "Yo estoy dispuesto a hacerlo. He apoyado al Gobierno en el plan de apoyo a las entidades financieras. Estoy dispuesto a apoyarle en el tema de las cajas. Pero si hace propuestas que creo que son malas para España, no le apoyaré".
El líder del PP salió contento. Y cerró el programa dejando claro que prefiere las preguntas de los ciudadanos a las de los periodistas, siempre más complicadas. "Ahora viene el análisis en 59 segundos", le dijo Lorenzo Milá. "Ya, pero el verdadero análisis estaba aquí", contestó Rajoy.
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