Izquierda Unida pierde apoyo en Córdoba

La alcaldía de Córdoba, la única en manos de la coalición Izquierda Unida, a punto estuvo ayer de dar un susto ante el retroceso del apoyo a la actual alcaldesa, Rosa Aguilar, que perdió dos de sus 13 concejales en favor del Partido Popular y un 4% de votos. La aritmética permitiría sin embargo conservar la alcaldía apoyados por el PSOE. La coalición logró mantenerse, e incluso subir levemente, en la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid.

En datos globales, con el 99% de los votos escrutados en toda España, IU logró la alcaldía por mayoría absoluta en 57 municipios y relativa en 55. Los resultados indicaban un leve retroceso en votos.

El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, destacó anoche en su valoración de los resultados que su formación ha cumplido con el objetivo de ser una fuerza "determinante" para "desempatar" a favor de la izquierda. Para Llamazares, IU y sus coaliciones han obtenido un "buen resultado que muestra cómo la izquierda es plural, y el país es plural".

Llamazares aseguró también que Rosa Aguilar logrará los concejales suficientes para gobernar Córdoba con estabilidad, junto con el PSOE. En Murcia, Zaragoza, y sus respectivas comunidades "mantenemos y aumentamos la presencia institucional". Llamazares recalcó también el carácter bisagra de IU en Navarra, y posiblemente en Baleares y capitales como Toledo y Jaén.

Llamazares avanzó cuál será la clave de sus pactos, en particular lo relativo al urbanismo sostenible. "Queremos mayorías de izquierdas que se planteen programas comprometidos con los ciudadanos, un urbanismo sostenible, razonable y en favor de la calidad de vida de los ciudadanos, servicios públicos universales, municipios democráticos y participativos, limpios, transparentes", aseguró.

En elecciones municipales, Izquierda Unida sufrió la pérdida de casi la mitad de sus votos totales entre 1995 y 1999. De casi 2.600.000 votos, el 11,68% de total nacional, que le suponían 3.493 concejales en toda España, en esos cuatro años pasó a unos resultados de casi 1.400.000 votos. Su influencia en los ayuntamientos se redujo en más de mil concejales hasta quedarse en 2.295. La situación no ha mejorado desde entonces, y los resultados de mayo de 2003 fueron prácticamente un calco de los anteriores, si cabe con un leve descenso. La coalición llegaba a las elecciones de ayer con el 6,07% de los votos y 2.198 concejales en toda España. A las 11 de la noche, había bajado al 5,57% de los votos y 2.003 concejales.

Mientras PP y PSOE se esforzaban por hacer de la lucha antiterrorista o la guerra de Irak temas de interés local, Izquierda Unida ha basado buena parte de sus mítines en la lucha contra la corrupción municipal generada por el urbanismo salvaje. Sólo en los últimos días de campaña Gaspar Llamazares no ha podido evitar referirse al PP en respuesta a las salidas de tono del ex presidente José María Aznar. Por su parte, a Zapatero le ha dedicado una de las críticas más finas que se han oído en la campaña: "No se puede vivir siempre de las rentas de Irak".

Los problemas internos de IU tuvieron su máxima expresión en la elaboración de las candidaturas de Madrid, donde una parte de los militantes consideraron que las candidaturas eran ilegítimas. La impugnación de las mismas fue aceptada y finalmente los puestos fueron repartidos ente dos sensibilidades. Si Sabanés ha repetido como candidata ha sido gracias a esa impugnación. Ha frenado la caída de IU, aunque el avance del PP hace imposible repetir la fugaz alianza de 2003.

Tras las elecciones, cabe esperar a ver qué da de sí la anunciada "refundación" de IU que ha propuesto Llamazares. El coordinador dijo que espera que el Partido Comunista participe de forma activa y constructiva en este proceso, del que no ha dado detalles. El PC ya ha expresado públicamente su desconfianza respecto a este proyecto.