_
_
_
_

EE UU deniega la licencia para vender 12 aviones españoles a Venezuela

El Gobierno de Bush alega que Chávez contribuye a la inestabilidad en la región

El Gobierno de Estados Unidos informó ayer al Ejecutivo español y a la empresa EADS-CASA de que ha decidido denegar la solicitud cursada para la venta a Venezuela de 12 aviones de fabricación española que incluyen tecnología estadounidense. EE UU alega que, "a pesar de haber sido elegido democráticamente", el Gobierno de Hugo Chávez ha socavado "sistemáticamente" las instituciones democráticas, y que las "acciones y frecuentes declaraciones" del Ejecutivo venezolano contribuyen a la inestabilidad en la región, de modo que la venta de los aviones "tiene el potencial de complicar la situación".

Más información
Exteriores dice que el veto a la venta de aviones a Venezuela es "comercial" y EE UU lo niega
Rumsfeld invocó la actividad de ETA en Venezuela para objetar el contrato

La Embajada de EE UU en Madrid informó de que el embajador, Eduardo Aguirre, se reunió ayer con el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, para informarle de la decisión del Gobierno de George W. Bush de denegar la preceptiva autorización para vender los aviones a Venezuela. Aguirre telefoneó después al titular de Defensa, José Bono -quien asistió a la firma del mayor contrato de la industria militar española en Caracas el pasado 28 de noviembre-, y a la empresa afectada, EADS-CASA.

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, había condicionado la formalización de la compra de esos 12 aviones y de ocho buques, por un total de 1.700 millones de euros, a la asistencia de Bono al acto. La venta de los patrulleros, que fabricará el astillero público Navantia en la bahía de Cádiz (cuatro de vigilancia costera y cuatro oceánica), no supone ningún problema, ya que carecen de tecnología estadounidense.

Sin embargo, la filial española del consorcio aeronáutico europeo necesita la licencia de EE UU para exportar los aviones (10 de transporte C-295 y dos de patrulla marítima CN-235), ya que incluyen componentes procedentes de ese país, especialmente en motores y aviónica. Los 12 aparatos cuestan un total de 500 millones.

Técnicamente sería posible sustituir los componentes estadounidenses por equipos de origen europeo, pero económicamente no resulta rentable, según los expertos.

Modelo de autocracia

El Gobierno del país norteamericano arguye para denegar esa autorización, tras analizar "cuidadosamente" la solicitud, que "a pesar de haber sido elegido democráticamente, el Gobierno del presidente Hugo Chávez sistemáticamente ha socavado las instituciones democráticas, presionando y acosando a los medios de comunicación y a la oposición política, y progresivamente incrementa su modelo de autocracia y oposición a la democracia", según afirmó un portavoz de la embajada de EE UU en Madrid.

Añade que las acciones y declaraciones del Ejecutivo venezolano "contribuyen a una inestabilidad regional" en una zona "necesitada de estabilidad política". Y entiende que "la propuesta de venta de plataformas aéreas tiene el potencial de complicar la situación".

Finalmente, el Gobierno de EE UU matiza que esta decisión "no predispondrá consideraciones de posibles futuras solicitudes de EADS-CASA" y que en todo caso se ha tomado en "temas relacionados exclusivamente con el Gobierno de Venezuela". Así, EE UU "no espera que esta decisión vaya a afectar adversamente las excelentes relaciones" que mantiene con el Ejecutivo español.

La resolución del Ejecutivo de Bush no ha sido una sorpresa, toda vez que ya antes de la firma del contrato tanto el embajador Aguirre como Daniel Fried, alto cargo del Departamento de Estado, habían expresado las reticencias de EE UU a conceder la licencia de exportación.

Consciente de esa disposición contraria a la operación, el Gobierno español realizó numerosas gestiones para tratar de convencer a las autoridades de Estados Unidos de la inocuidad de la venta de material militar a Venezuela.

Una de las últimas iniciativas del Ejecutivo para tratar de ablandar a las autoridades de Washington se produjo a mediados de noviembre, cuando el ministro de Defensa mantuvo una conversación con el embajador de Estados Unidos en Madrid.

Fuentes gubernamentales recordaron entonces que la obtención de la licencia compete a las empresas implicadas, por lo que el contrato se firmó con una cláusula en la que se hacía constar que su materialización está a expensas de aportar toda la documentación requerida.

José Bono y Hugo Chávez, en Caracas, durante la firma del contrato con EADS-CASA.
José Bono y Hugo Chávez, en Caracas, durante la firma del contrato con EADS-CASA.ASSOCIATED PRESS

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_