"La burbuja se veía venir y por eso diversificamos"
José Ramón Carabante (Málaga, 1952), propietario del Grupo 2002, ha firmado recientemente la compra del Grupo Hispania, una promotora con importantes intereses inmobiliarios en Murcia, además de centros comerciales en varias provincias españolas e iniciativas en México, Brasil y EE UU. Carabante, quien se considera murciano de adopción, dice que la adquisición de esta sociedad le permite diversificar su compañía, ya que la firma de Trinitario Casanova aporta varios centros comerciales y hoteles.
Pregunta. Ha comprado el Grupo Hispania por cerca de 650 millones de euros, ¿no es un poco arriesgado con el sector inmobiliario en plena crisis?
Respuesta. No. Nos interesaba porque tiene activos en terciario, sobre todo en centros comerciales, en Extremadura, Asturias, Castellón, Madrid y Andalucía; y muy buenos edificios, sobre todo en Murcia. Pero también tiene una vertiente internacional, concretamente en México, Brasil y en Estados Unidos, que complementa nuestros intereses. Nosotros estamos en Nueva York y en otras partes de EE UU. Con esta compra queremos apostar por otros mercados, como por ejemplo los centros comerciales.
"Lo primero que hicimos en Hispania fue vender el 1% del Banco Popular"
"Cuando hace un año salimos de Colonial nos consideraron tontos"
P. Han apostado entonces por diversificar el negocio.
R. Sí. Con Hispania venimos a consolidar la diversificación del Grupo 2002. Nosotros hemos venido construyendo viviendas con el grupo inmobiliario, pero desde 2007 estamos diversificando, y esto nos ha hecho meter una pata en sanidad. De hecho, participamos en tres firmas con socios distintos, gente importante en el sector, como por ejemplo el director de la división de Patología Molecular del Memorial Sloan-Kettering Cancer Center de Nueva York, Carlos Cordón. Asimismo, estamos ultimando la creación de una sociedad que va a construir hospitales con spa de lujo.
P. ¿No ha sido un poco un visionario al no apostar todo a la carta del ladrillo?
R. Visionario, no. Teníamos muy claro cómo estaba el panorama. Cuando salimos de Colonial nos consideraban los patitos feos, por no decir los tontos del bote, porque salimos a 5,20 euros la acción y parecía que se iba a ir hasta los 10. Simplemente habíamos cumplido un ciclo. Y por eso desinvertimos y nos fuimos. La burbuja se veía venir, pero no la crisis actual. Porque la crisis no es sólo inmobiliaria, es sobre todo una crisis financiera y eso es lo que nos ha llevado a diversificar. Y por eso hace siete meses fichamos al director general de Expansión de Ikea, para sacar adelante todos los centros comerciales.
P. ¿Cómo ve la situación del mercado inmobiliario?
R. Mal. Es un momento difícil y el sistema financiero está en una crisis de carácter mundial. Si no se toman medidas rápidas y flexibles esto estará cada vez peor. No es que haya psicosis de que hay crisis, sino que estamos inmersos en ella. No se venden viviendas y ya no se obtienen las ayudas financieras que antes sí se obtenían de la banca. Ahora si entras en un banco y dices que eres inmobiliario poco más o menos que saltan las alarmas. Esta situación no tiene sentido. Y hemos pasado de ayudar y el vale todo al no vale absolutamente nada.
P. ¿La solución podría estar en la vivienda de protección oficial?
R. Es una parte de la solución, porque también habría que liberar el suelo de otra manera y hacer infraestructuras. La construcción está paralizada, por lo que la solución pasaría por refinanciar la deuda de todas las compañías. El sector inmobiliario no está pidiendo que se le condone la deuda, simplemente solicita que se le ayude. Se da la paradoja de empresas que están vendiendo pisos y luego los bancos no les conceden hipoteca a los compradores, con lo cual nos están ahogando.
P. ¿Cree que el Instituto de Crédito Oficial (ICO) debería haber financiado a Martinsa-Fadesa?
R. No he estado en la operación, pero si se dice que se va a financiar una cosa, y me consta que eso fue así, habría que haberlo hecho. Lo que no puede ser es que la empresa tuviera un plan de viabilidad, basado en unas perspectivas, y luego cuando llega la hora de la verdad digan que no.
P. ¿Ustedes han entrado en la banca y el sector financiero con la compra de Hispania?
R. Sí. De hecho teníamos ya una sociedad, Corporación Issos, encabezada por el ex ministro Miguel Boyer, que es financiera pura y dura. Y con esta empresa compramos en Colonial. No es banca, pero estamos hablando de inversiones de 300 o 400 millones de euros cada una.
P. ¿Y la adquisición del 1% del Popular que tenía Hispania?
R. Ha sido algo transitorio. Coincidió que el Grupo Hispania tenía una inversión y lo primero que hemos hecho ha sido poner en venta las acciones del Popular. Y ya las hemos vendido.
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