El sector sevillano de la construcción inicia una huelga para pedir la jornada intensiva
Los trabajadores se quejan de las duras condiciones que soportan en verano.- La patronal considera "injustos y carentes de fundamento" los paros
A partir de esta noche entra en vigor la huelga en el sector de la construcción en Sevilla. Los sindicatos CCOO (FECOMA) y UGT (MCA) de la capital hispalense la han convocado al no lograr un acuerdo tras el acto de conciliación celebrado en el Sistema Extrajudicial de Conflictos Laborales de Andalucía (SERCLA). Según los sindicatos, se verán afectados unos 85.000 trabajadores de la provincia que plantean que en los tres meses de verano se trabaje tan sólo desde las 7.00 hasta las 14.00 de la tarde. El "objetivo número uno" de la huelga, las obras para construir la primera línea del metro de la ciudad.
Los sindicatos dicen contar con estudios que recogen una disminución de la productividad de hasta el 70% a partir de las 15.00, pero Gaesco ?la patronal del sector- ha asegurado que no les han presentado ningún informe al respecto. El secretario general de CCOO-Andalucía, Francisco Carbonero, ha hecho un llamamiento a la "sensatez" de los empresarios de la construcción y ha dicho que "no es admisible" que en la mayoría de las provincias se implante la jornada intensiva en la construcción en verano y en Sevilla se nieguen.
Carbonero también ha criticado que en la provincia de Sevilla no se haya cerrado un acuerdo salarial en el sector de la construcción cuando los empresarios han tenido unos "inmensos beneficios" en los últimos años. Y ha apuntado que los empresarios "deberían hacer un gesto de responsabilidad social y devolver a la sociedad lo que ésta le ha dado en forma de beneficios" con más inversión. El secretario provincial de la Federación de Construcción, Madera y Afines (Fecoma)
de CCOO, Antonio Salazar, ha anunciado que las obras que ejecuta la unión temporal de empresas (UTE) integrada por Sacyr, Dragados y Gea 21 para construir la primera línea del metro de Sevilla, y que han llegado a agrupar a más de 1.700 trabajadores, serán el "objetivo número uno" de la huelga.
"Pretexto deleznable"
Por su parte, los empresarios consideran "injusta y carente de fundamento" la huelga convocada en este sector por el desacuerdo en la aplicación de la jornada intensiva durante los meses estivales. La patronal ha tildado de "pretexto deleznable" que los sindicatos aleguen razones de salud laboral. El presidente de Gaesco, Miguel Rus, ha admitido que las altas temperaturas durante el verano producen "una serie de riesgos", pero ha recalcado que esa circunstancia está prevista en los planes de prevención de cada obra, que incluyen medidas como que las mayores cargas de trabajo se realicen a primeras horas del día. "Detrás de la huelga está siempre lo mismo, trabajar menos", ha denunciado Rus quien ha advertido de que "éste no es el camino para conseguir una Andalucía más competitiva".
El presidente de Gaesco, ha subrayado que Sevilla es la provincia con el porcentaje más elevado de jornadas intensivas y ha insistido en que la huelga no está "justificada". "Por supuesto que a 50 grados no se puede trabajar", ha insistido Rus, pero ha recordado que "para eso están los planes de prevención". La patronal ha lamentado, además, que se haya tenido que "enterar por los medios de comunicación" de la convocatoria de cinco días de huelga (27 y 28 de mayo y 3, 4 y 5 de junio).
La de los piquetes es una fórmula más de terrorismo sindical", ha asegurado Rus, quien ha agregado que la jornada intensiva en los meses estivales supondría unas pérdidas del 30 % de la productividad.
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