_
_
_
_
ESPAÑA 0 - ESTADOS UNIDOS 2 | COPA CONFEDERACIONES

Fin de fiesta

Tras 35 partidos sin perder, el equipo de Del Bosque se estrella contra Estados Unidos y se queda sin final

A España se le apagaron las luces 35 partidos después. Nada es eterno, por lo que su derrota ante Estados Unidos, por inesperada que fuera, no rebaja la excelente trayectoria de un equipo que destapó Luis Aragonés y ahora tutela Vicente del Bosque. Un traspié accidental que no tendría que agitar ningún debate pesimista en torno a una selección de estilo exquisito y más eficaz que ninguna desde noviembre de 2006, fecha de su último patinazo, en un partido amistoso en Cádiz ante Rumanía. De hecho, en los citados 35 partidos, solo en otras dos ocasiones, además de anoche, se quedó sin marcar: en un amistoso contra Finlandia y frente a Italia en la Eurocopa. Ayer se lo impidió Estados Unidos, que demostró ser un conjunto sólido y vitalista. A España no le faltó actitud, ni mucho menos, pero sí el virtuosismo de otras veces y una mira más ajustada para no desperdiciar tantas oportunidades durante el segundo tramo, cuando los norteamericanos sembraron su área de espinas. Ahora, salvo que Brasil descarrile hoy ante Suráfrica, ya no podrá fabular con los pentacampeones del mundo y tendrá el suplicio de soportar cuatro días más de concentración hasta disputar el domingo el encuentro por el tercer puesto. Así es el formato de esta Copa Confederaciones, en la que solo una consolación contra Brasil aliviaría el cautiverio español en la polar Bloemfontaine.

ESPAÑA 0 - EE UU 2

España :Casillas; Sergio Ramos, Piqué, Puyol, Capdevila; Cesc (Cazorla, m. 68), Xabi Alonso, Xavi, Riera (Mata, m. 78); Villa y Fernando Torres. No utilizados: Diego López, Reina; Albiol, Marchena, Arbeloa, Busquets, Pablo, Silva, Llorente y Güiza.

EE UU : Howard; Spector, Onyewu, Bocanegra, DeMerit; Dempsey (Bornstein, m. 89), Clark, Bradley, Donovan; Davies (Feilhaber, m. 69) y Altidore (Casey, m. 83). No utilizados: Guzan, Robles; Califf, Wynne, Pearce, Beasley, Klejstan, Torres, y Adu.

Goles: 0-1. M. 27. Altidore recibe un pase picado al hueco de Dempsey, protege con su cuerpo el balón se gira y marca de fuerte disparo. 0-2. M. 74. Demspey se adelanta a Sergio Ramos y marca a puerta vacía.

Árbitro: Jorge Larrionda (Uruguay). Expulsó por roja directa a Bradley (m. 86). Amonestó a Donovan,Altidore, Capdevila y Piqué.

Free State Stadium: 40.000 espectadores.

Más información
"Solo ha sido un accidente"
Casillas: "Esta derrota nos va a fortalecer de cara al Mundial"
Mucho remate, poca puntería

La selección española se desplegó más atrofiada que de costumbre, sometida por el vigoroso equipo estadounidense, decidido a cortocircuitar el juego español, tan fluido en los últimos tiempos. Los delanteros de Bob Bradley se ocuparon de frenar a España desde el inicio del juego. Para Casillas resultaba un suplicio poner la pelota en juego a los pies de un socio. Si el cuadro de Del Bosque superaba el primer muro, el mecano norteamericano apenas le dejaba rendijas, con volantes, pivotes y defensas tan cercanos unos de otros como lejanos de su portero, Howard. El campeón de Europa, atornillado. El pegamento estadounidense propició una catarata de fallos en cadena, excepcional en un equipo que se ha instalado en la realeza del fútbol por su talento para trenzar el juego con sutileza: malos controles, pases dislocados, desatenciones ante el fuera de juego. No era España; sí era Estados Unidos, nada acartonado, nada que ver con los adversarios precedentes en la Copa Confederaciones. Resultó una selección ordenada, musculosa y muy directa hacia Casillas, aunque se prodigara cada vez menos en el transcurso del encuentro, atosigada por el desenfreno ofensivo español. Estados Unidos ya no es aquella pandilla de universitarios que se dedicaba al soccer casi de forma clandestina. Hoy, su esqueleto está formado por futbolistas profesionales curtidos en Europa. Ha perdido ingenuidad. En dos partidos en un año, España solo ha logrado anotar un gol ante los norteamericanos.

El tanto de Altidore retrató la primera fase del juego. Con España en trance, una pérdida en un lateral derivó en un pase al culturista delantero del Villarreal. Le esposaba Capdevila, pero el fortachón ariete impuso su carrocería de acero frente a su compañero de equipo. Ante su remate frontal, Casillas, vencido antes de tiempo, apenas pellizcó el balón. Por una vez, España tenía el marcador en contra. Como no le falta carácter, la perseverancia la aproximó poco a poco a Howard. Con su estilo, sin precipitarse, pero con menor precisión que en otras ocasiones. Al igual que en los partidos anteriores, con excesiva tendencia a hacer gravitar el juego por el eje central, donde la montonera se vuelve laberíntica. Tan solo Riera y Ramos se abrochaban a las bandas. Con Iniesta y Silva, España alista interiores tan capaces por los costados como por el embudo.

Pese a la espesura en el juego, con Xavi de catalizador, Villa, que se mostró ofuscado como nunca, y Torres se citaron varias veces frente al gol antes del toque de corneta del segundo tiempo. España, apretada por el resultado, aumentó los decibelios, mientras que su rival, también condicionado por una ventaja con la que no contaba, retrasó considerablemente el dique. El asalto español fue constante. Su propio desatino, el meta norteamericano y su ejército defensivo y un exceso de precipitación condenaron al grupo, que entregó definitivamente la cuchara tras una falta de aplicación de Ramos, al que Dempsey le robó la pelota a un palmo del flequillo de Casillas tras confiarse en un control. Para España resultó la puntilla. Sus desgarros defensivos y la falta de puntería en su explosivo arranque tras el intermedio la precipitaron a una derrota un tanto azarosa. Fin de fiesta.

Piqué y Casillas, durante el encuentro
Piqué y Casillas, durante el encuentroAFP

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_