Victoria de estilo
El Almería se crece ante el Valladolid pese a quedarse con nueve
Nadie le discute a Hugo Sánchez su pasado de delantero despiadado y brutal ante la portería. Cuando aterrizó en Almería, tampoco nadie le discutió su capacidad como técnico para remontar el vuelo del cuadro andaluz, después de encadenar cuatro encuentros sin perder. Ayer acalló las voces discrepantes que le habían puesto en entredicho tras dos derrotas consecutivas. La victoria ante el Valladolid, remontada incluida con dos jugadores menos, aumenta su crédito. Y sobre todo, consolida el sello que quiere imprimir a de su equipo, que no se amilanó ante la efectividad del cuadro de Mendilibar.
El técnico mexicano tiene claro el estilo de juego que le gusta. Orden defensivo, rigor táctico y ataques directos. Sin embargo, la zaga andaluza hizo aguas, y por ahí se hundió en el primer tiempo. Se vio en el segundo gol del cuadro de Mendilibar. Goitom remató a placer tras una rocambolesca jugada en la que el balón rebotó en todo el que se interpuso en su camino. Pese a todo, el Almería no perdió nunca la cara al partido. Ni cuando un zapatazo milimetrado de Pedro León le había quitado antes las telarañas a la portería de Diego Alves. Ni después del mazazo de Goitom.
Almería 3 - Valladolid 2
UD Almería: Diego Alves (7), Bruno, Chico, Acasiete (6) (Jose Ortiz, m. 58), Pellerano (6); Iriney (Corona, m. 46), Juanito; Juanma Ortiz, Kalu Uche, Crusat, y Negredo (Carlos García, m. 82).
Real Valladolid: Justo Villar (7); Pedro López, Prieto, Iñaki Bea, Nano; Rubio, Borja (Oldoni (sc), m. 82); Pedro León, Víctor (Haris, m. 73), Jonathan Sesma (Escudero, m. 82), y Goitom.
Goles: 0-1, m. 16: Pedro León. 0-2, m. 21: Goitom. 1-2, m. 61: Crusat. 2-2, m. 69: Uche. 3-2, m. 78: Negredo.
Arbitro: Muñiz Fernández (colegio asturiano). Expulsó con roja directa a Bruno (m.63) por una entrada a Pedro León y a Uche (m.77), por un manotazo a Nano, y al visitante Nano (m. 81) por doble amonestación. Además amonestó a los locales Alves, Iriney, Acasiete, Chico y Negredo y a los visitantes Nano e Iñaki Bea.
Incidencias: Partido disputado en el estadio de los Juegos Mediterráneos ante 15.261 espectadores.
El conjunto de Hugo Sánchez le ha cogido el gusto al balón, y no lo suelta fácilmente. Con él en los pies, es probable que las ocasiones lleguen. Esa idea rondaba por la cabeza de los jugadores, que continuó martilleando la caseta de Justo Villar. El conjunto de Mendilibar se replegó ante la perseverancia de los locales. Picó piedra el Almería, y Crusat encontró el oro tras el descanso. El extremo catalán estrenó su casillero goleador en Liga al embocar un rechace del meta paraguayo.
Los rojiblancos encaraban el segundo tiempo con ánimos renovados. Aunque Bruno, primero, y Uche después, enfilaran los vestuarios tras ser expulsado. Más tarde sería el Valladolid quien perdió a Nano por tarjeta roja. Fieles a la consigna del toque y la elaboración, avanzaron con la fe del que lleva desde el pasado noviembre sin caer en su estadio. Y así siguieron ayer, con la inestimable colaboración del portero del Valladolid. Un muslo de Villar mandó al fondo de la red un cabezazo tibio de Uche. Y una salida suya, a lo loco, le brindó el triunfo a Negredo que tuvo suficiente con hacer volar el balón por encima de la defensa,vacía y desasistida como estaba la portería .
El Almería mantuvo siempre su idiosincrasia. Sin tener en cuenta el marcador.Así fue capaz de remontar con diez jugadores, ganar con nueve y dejar helado a un Valladolid que poco hizo en el segundo tiempo para evitar que se le escaparan los tres puntos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.