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Crisis financiera mundial | Impacto en los mercados

La morosidad se triplica en el año hasta su nivel más alto desde 1998

El fuerte aumento de impagos en las cajas de ahorros impulsa al 2,5% el porcentaje de dudosos del sistema financiero en agosto

El deterioro de la situación económica en España tiene un indicador incuestionable en la tasa de morosidad del sistema financiero. Cuando las cosas se ponen difíciles, particulares y empresas dejan de pagar las cuotas de sus créditos. En agosto, el porcentaje de impagos sobre el volumen total de crédito concedido por bancos, cajas y establecimientos de crédito se situó en el 2,5%, cifra que triplica la del mismo mes de 2007 y que no se alcanzaba desde mayo de 1998.

Según los datos incluidos en el Boletín Estadístico del Banco de España que se dieron ayer a conocer, el importe total de impagados del sector se situó en 46.125 millones de euros, de un total de 1,842 billones de euros, lo que supone un aumento del 13% respecto a julio y del 228% respecto a agosto de 2007. Por segundo mes consecutivo, la tasa de morosidad se situó por encima del 2% en agosto. Por tipo de entidades financieras, los dudosos -aquellos que han incumplido el pago de sus cuotas durante más de tres meses- se concentran más en las cajas de ahorros, donde alcanzaron en agosto 25.467 millones de euros, el 2,9% del volumen total, tras registrar un 2,55% en julio. En agosto de 2007, el porcentaje de dudosos de las cajas era del 0,77% del total. La morosidad de los bancos alcanzó el 1,99%, lo que equivale a un importe de 15.946 millones de euros, tras un 1,74% en julio. En agosto del año pasado, los impagados de la banca representaban el 0,7% de sus créditos totales.

En el caso de las cooperativas de crédito, la morosidad se colocó en agosto en el 2,05%, con créditos dudosos por importe de 1.946 millones de euros, sobre una cartera total de 94.924 millones. La subida de la morosidad en agosto es la decimocuarta consecutiva y se produjo en un mes en el que el Euríbor, indicador de referencia para las hipotecas en España, se situaba en el 5,323%, según datos de la Asociación Hipotecaria Española. A principios de año, ese tipo de interés era del 4,498%. La crisis de los mercados financieros mundiales ha venido disparando este indicador y en septiembre alcanzó el 5,384%.

El aumento de la morosidad registró en julio un salto espectacular tras el concurso voluntario de acreedores -situación equivalente a la antigua suspensión de pa-gos- de Martinsa-Fadesa, que inyectó créditos morosos en bancos y cajas por importe de 4.100 millones de euros. El importe total de dudosos pasó de 31.220 millones de euros en junio a 40.840 millones en julio.

Según Pablo Guijarro, socio de Analistas Financieros Internacionales (AFI), los datos conocidos ayer son "malos" y acentúan la tendencia negativa. Este año, en su opinión, la tasa de morosidad podría llegar hasta el 3,2% y el año que viene este parámetro podría dispararse hasta el 6%. Con todo, no hay razones para la alarma: "Pensamos que el sistema financiero español es suficientemente fuerte como para aguantar esa tasa de morosidad", asegura.

Y da tres razones: en primer lugar, las entidades financieras tienen un exceso de recursos propios; en segundo lugar, hay una provisión genérica que podría absorber parte de la nueva morosidad; por último, las cuentas de resultados son suficientemente sólidas como para encajar nuevas dotaciones para créditos dudosos si son necesarias. "En otras palabras, las entidades financieras españolas son muy eficientes porque tienen un margen de explotación -la diferencia entre ingresos y gastos- bastante elevada y aunque practiquen nuevas dotaciones, aún darán beneficios", añade.

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