La incertidumbre provoca nuevos descensos

La volatilidad se ha adueñado de los mercados y continúa sembrando el desconcierto entre los inversores más moderados. En las actuales condiciones, los mercados parecen incapaces de mantener una orientación concreta más de dos horas, lo que indica que los criterios de actuación son tan inestables como los resultados que provocan.

Los mercados de valores europeos abrieron esta sesión con avances que superaron el 2% ante la reacción positiva de la Bolsa de Nueva York en la jornada anterior, en la que los valores bancarios se anotaron importantes recuperaciones a la espera de decisiones inminentes sobre su situación, que no llegaron.

El Ibex 35 abrió con una subida del 2,68% que se fue diluyendo poco a poco hasta caer el 1,38% poco antes del cierre. Al igual que en la sesión anterior, las decisiones tomadas "a bote pronto" fueron las causantes del desaguisado, aunque los valores bancarios consiguieron rehacerse ligeramente al cierre y el Ibex 35 terminó con un descenso de sólo el 0,87% y en 8.159,30 puntos.

Con este nuevo retroceso cobran fuerza las hipótesis en pro de un descenso hasta los niveles mínimos del pasado año, basadas sobre todo en la escasez de compradores en las actuales circunstancias.

Las estrategias de inversión para el actual ejercicio de las sociedades y agencias de Bolsa, que ya comienzan a circular por el mercado, coinciden en que habrá una discreta recuperación y en que aún es demasiado pronto para tomar decisiones, sobre todo porque hay que esperar a la publicación de los resultados empresariales del primer trimestre para sacar más y mejores conclusiones. Así las cosas, los resultados anuales que se están publicando en estos días, no se consideran más que un aperitivo que de ningún modo marcará tendencia.

Los últimos datos económicos publicados en Estados Unidos continúan apuntando un serio deterioro de la economía, con una caída del 15,5% al final de diciembre, en tasa anual, de la construcción de viviendas y un descenso del 10,7% en los permisos de construcción. Las solicitudes de desempleo subieron con fuerza en la última semana, hasta acercarse al nivel psicológico de las 600.000 solicitudes, mientras que la única buena noticia, en términos relativos, fue el aumento de las reservas de crudo y gasolina, por el retroceso de la demanda.