Yamaha cerrará su planta en Barcelona y se concentrará en Francia

La compañía japonesa Yamaha cerrará la fábrica de motos de Palau-solità i Plegamans, en Barcelona, en la que trabajan más de 430 trabajadores, aduciendo una caída del negocio en Europa, según ha confirmado Francesc Xavier Mena, consejero de Empresa y Ocupación. La multinacional nipona, que de momento no ha hecho declaraciones, tiene previsto comunicar oficialmente mañana a los sindicatos el cierre de la fábrica. Mena ha asegurado que cuando tomó posesión ya sabía que Yamaha estaba planeando una reorganización de su producción europea. Ha explicado que la empresa ha decidido trasladar toda la producción de la planta catalana a sus instalaciones cercanas a París. "Es por motivos únicamente corporativos. No tiene nada que ver con la productividad o la competitividad", ha insistido. En junio de este año comenzará a reducirse la producción en la planta. En 2011, no tendrá actividad.

Mena ha declarado esta mañana que están haciendo esfuerzos desde el Gobierno para lograr que los empleados sean recolocados, algo para lo que la empresa japonesa está colaborando activiamente. Si los empleados quieren trasladarse a Francia, tendrán un puesto en esa planta. Si no, quizá puedan ser reubicados en otras empresas de componentes o incluso de otros sectores, ha dicho. También se ofrecerán prejubilaciones a los trabajadores de más edad. "Estamos en conversaciones con empresas de la misma zona, que han aumentado su producción", añadió el consejero, que espera que alguna de esas compañías pueda absorber puestos de trabajo e incluso instalaciones.

Los sindicatos han mostrado su sorpresa ante la noticia. Tanto UGT como CC OO aseguran que los empleados se han enterado esta mañana del anuncio de cierre a través de los medios de comunicación, y estaban tratando de recabar detalles ante la preocupación de la plantilla. La empresa, a media tarde seguía sin darles información ni hacer declaraciones. Mena ha confirmado que hasta mañana no anunciará la decisión que ya todos conocen y según el consejero no tiene marcha atrás.

CC OO ha criticado en un comunicado que "Yamaha España ha obtenido históricos beneficios y tiene una situación financiera solvente, que ha servido de soporte a las pérdidas de la planta francesa, a la que pretenden deslocalizar la producción". UGT ha recordado además que la decisión le parece contradictoria con las inversiones realizadas en la planta catalana. "Y la producción se había recuperado un 40% de 2009 a 2010", ha añadido. Ambas agrupaciones han expresado que no aceptarán el cierre.

La planta de Palau era la única instalación en activo del grupo Yamaha en España, ya que el resto de divisiones están centradas en la comercializción de productos hechos en otros países. El pasado mes de diciembre, el presidente y directivo histórico de Yamaha en España, Jorge Lasheras, abandonó la compañía después de 22 años y fue relevado por Hajime Yamaji, máximo responsable de Yamaha en Europa, que asumió su cargo con el objetivo de cerrar la factoría.

Yamaha cuenta con una capacidad instalada de 130.000 unidades, pero en 2010 la fabricación fue inferior a las 96.000 motocicletas. En 2009, la también japonesa Honda anunció el traslado a Italia de su producción española, donde cuenta con una fábrica a escasos metros de la de Yamaha y, actualmente, sólo mantiene en Barcelona la actividad comercial y una línea de pintura.