Lladró anuncia 275 despidos al no lograr superar la crisis

Lladró despedirá a 275 trabajadores, un 19% de su plantilla, para "garantizar la continuidad de la compañía" afectada por una grave crisis desde 2002. La firma valenciana, líder mundial de las figuras de porcelana de lujo, entró en pérdidas ese año, y no ha logrado remontar el vuelo. La intensa búsqueda de soluciones a la caída de ventas, incluido el lanzamiento de productos muy alejados de su línea tradicional, se ha estrellado con la crisis. La empresa, que había reducido la jornada de un millar de empleados (trabajan cuatro días a la semana), anunció ayer el primer despido colectivo en su medio siglo de historia.

El Expediente de Regulación de Empleo (ERE) será presentado la semana que viene ante la Generalitat. Afectará a las áreas de producción de Porcelanas Lladró y de Arte y Porcelanas (que fabrica la marca Nao). Una portavoz descartó que la firma se plantee cerrar tiendas. Para volver a las ganancias, dijo, hace falta vender. Lo cual no significa que no sea necesario "afinar" la distribución. Las nuevas y radicalmente distintas colecciones, como Fantasy, obra del diseñador Jaime Hayón, dan buen resultado pero generan también un problema de coherencia: amplían el mercado y a la vez no encajan en las tiendas que visitan los clientes de toda la vida.

A pesar de los despidos, la multinacional cree haber encontrado el camino correcto después de una etapa errática. En 2003, los tres fundadores cedieron las riendas de la empresa a la segunda generación de la familia en un proceso no exento de conflictos. En 2004 encargó a Alain Viot, ex directivo de Cartier, que reflotara la sociedad, y menos de tres años después lo despidió. En 2006, último ejercicio publicado, Lladró Comercial perdió 12 millones de euros, y Porcelanas Lladró, 9,6.