Carlos de Borbón se exculpa del 'caso Marsans' por su salud
El infante Carlos de Borbón-Dos Sicilias sufre una enfermedad degenerativa que le impide atender a sus responsabilidades como consejero de varias empresas, según afirmó su yerno Pedro López Quesada, en su declaración como testigo durante una vista celebrada por el juzgado que tramita el concurso de acreedores (suspensión de pagos) de Viajes Marsans.
Carlos de Borbón-Dos Sicilias, de 73 años, se enfrenta a un posible embargo cautelar de sus bienes por su actuación como consejero independiente de Viajes Marsans, dentro del proceso de insolvencia de la compañía que tramita el Juzgado de lo Mercantil número 12 de Madrid, y que juzga si el concurso fue culpable. El infante no acudió a la vista.
Los antiguos propietarios de Marsans, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, también se defendieron y afirmaron que la compañía era "viable" y operó con una "velocidad de crucero magnífica" hasta que la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) le retiró la licencia para vender billetes en abril de 2010, que fue su "estocada de muerte".
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