La Bolsa de Tailandia se desploma y desata el temor a una crisis asiática

La Bolsa de Tailandia se tambaleó ayer de forma dramática con una caída del 14,8% y arrastró los ánimos de los mercados bursátiles del planeta, en una especie de tsunami que recordó la crisis financiera vivida en Asia entre 1997 y 1998. Sin embargo, la sangre no llegó al río porque el Gobierno militar de Tailandia revocó las limitaciones impuestas a la inversión extranjera antes de la apertura de Wall Street. El Ibex 35 cayó un 0,98%.

El Gobierno de Tailandia se vio ayer forzado a revocar sus limitaciones sobre la inversión en activos financieros de renta variable un día después de su imposición. La decisión que tomó el Banco Central de este país afectaba a todas las inversiones extranjeras en cualquier activo financiero, como renta variable o bonos.

En concreto se obligaba a retener un 30% en las operaciones en divisa extranjera en la que no intervengan exportaciones. Sin embargo, tras la fuerte caída bursátil, las autoridades militares han tenido que rectificar. La caída del 15% en Bangkok es la mayor desde la crisis de los tigres asiáticos entre 1997 y 1998

Los inversores entendieron que esta decisión, de corte populista, perseguía devaluar la moneda para favorecer a las exportaciones. No obstante, lo que consiguió fue la masiva huida de capitales. En total, la Bolsa tailandesa perdió 23.000 millones de dólares en capitalización bursátil. Lo único positivo fue que la divisa se depreció un 2% frente al dólar, pero la renta variable pagó un alto precio.

Para evitar la ola de especulación que rodea al tipo de cambio entre la moneda asiática y el billete verde estadounidense, el banco central tailandés decidió imponer controles estrictos. La normalidad empezó a llegar a los mercados mundiales cuando el Ejecutivo tailandés anunció que levantaba algunas de estas restricciones. Pero esto no evitó que Tokio cerrara a la baja, igual que las bolsas de Taiwan y Corea del Sur, aunque las más afectadas fueron la de Manila, Jakarta, Singapore, Kuala Lumpur y Mumbai, con pérdidas de entre el 2% y el 3%.

Volatilidad

La volatilidad que se vive en el parque neoyorquino por la incertidumbre económica en Estados Unidos se vio amplificada en el arranque de la jornada por el desplome del mercado bursátil tailandés, aunque no duró mucho porque pronto llegaron las noticias con la marcha atrás de Bangkok. Una hora antes del cierre, Wall Street subía un 0,35%, después de haberse mantenido casi toda la sesión en el terreno negativo.

La situación se hace aún más complicada si se tiene en cuenta que Tailandia está controlado por militares desde el pasado verano, lo que tras las medidas anunciadas ayer podría minar la confianza de los inversores extranjeros hacia ese país. Y en paralelo, surge la duda de si otros países de la región del Pacífico asiático podrían adoptar medidas similares para contener la apreciación de sus monedas frente al dólar estadounidense.

En cualquier caso, como señalan desde el banco de inversiones UBS, la situación de Tailandia es bastante particular respecto a la de otros países vecinos. Y hay dudas sobre la credibilidad de la política financiera del ejecutivo tailandés, hasta el punto de que en Wall Street dicen que el Gobierno no fue capaz de anticipar el impacto de la medida. Se calcula que los inversores extranjeros controlan unos 50.000 millones de dólares en Bangkok, el equivalente al 30% del total. Si estos deciden retirar sus fondos de Tailandia antes de que pase un año, recibirán dos tercios del dinero controlado por el banco central del país.

El terremoto asiático llegó con fuerza a Europa, donde el índice eurostoxx perdió un 0,72%. España se llevó la peor parte con una pérdida del 0,98% del valor, mientras que el Dax de Alemania cayó un 0,66%, el CAC 40 de París un 0,82% y el Mitbel de Milán un 0,31%.

En el mercado español, tan sólo Sogecable y Endesa han conseguido mantener sus valores en positivo. La eléctrica consiguió un 0,11% de revalorización mientras que Sogecable ganó un 0,95%. En el lado de las pérdidas el sector constructor e inmobiliario acapararon el protagonismo. La peor parte se la llevó Metrovacesa, pero muy cerca le siguieron las acciones de Sacyr Vallehermoso. FCC completa la terna de valores más castigados, aunque el valor que más ha pesado en la caída del Ibex fue el Santander.