Un abogado pagó 30.000 euros a un edil de Estepona

Antonio Vallejo, un abogado de Estepona (Málaga) imputado por blanqueo y cohecho en el caso Astapa, declaró ante el juez instructor que pagó 30.000 euros en 2004 al edil Francisco Zamorano como comisión por informarle sobre unos terrenos. Zamorano, que en el año en el que se produjo la compra del suelo era director económico para la revisión del PGOU, "solicitó una comisión de 30.000 euros", que se pagó mediante una factura a nombre de la sociedad Lauzavi SL, cuya administradora es su mujer, y que tiene un objeto social relacionado con el mundo de la decoración y la fotografía.

Según Vallejo, Zamorano le recomendó a él y a otros dos empresarios, con los que mantiene vínculos familiares, que compraran dos fincas en la unidad de Atalaya Park, suelo que finalmente adquirieron en diciembre de 2004 por un importe de 751.260 euros.

Casi dos años después, en septiembre de 2006, las dos fincas se vendieron por más "del triple de valor de compra", según el letrado Vallejo, por 3,66 millones de euros. Las parcelas se revendieron nuevamente el 7 de noviembre de 2006 a otra sociedad por 6,16 millones, una revalorización de casi diez veces en dos años.

En las últimas diligencias sobre las que se ha levantado el secreto de sumario, aparece también el reloj Cartier que el promotor de origen sirio Jamal Satli Iglesias regaló al considerado cerebro de la trama corrupta, el jefe de gabinete de alcaldía, José Flores. Satli también prometió que adquiriría unos terrenos de la madre de Flores para situar unas compensaciones urbanísticas que tendría que aportar al Ayuntamiento.

Con tales apaños, de los que ambos hablan en los pinchazos telefónicos, y que Satli negó después ante la Policía, se comprende, según los investigadores, el interés del ex jefe de gabinete por su expediente, y que el empresario se refiriera a Flores como "ángel de la guarda" de su familia.