Visteon acepta negociar el cierre de la planta de Cádiz
La empresa se compromete con la Junta a dialogar con los trabajadores
El día que la dirección de Visteon comunicó su intención de cerrar su factoría de componentes electrónicos para coches de El Puerto de Santa María (Cádiz), una de las cinco que tiene en España, no dio explicaciones al comité de empresa. "No more questions (no más preguntas)", respondieron los portavoces de la compañía a las preguntas de los sindicatos.
Ayer dedicó gran parte de las casi tres horas de reunión con la Junta de Andalucía a dar las razones económicas y estratégicas de esta clausura. El delegado de Empleo, Juan Bouza, saludó al menos que la empresa sí haya aceptado negociar con los trabajadores y haya decidido devolver la actividad a la planta, suspendida desde el día del anuncio de cierre, mientras no se alcanza esa solución dialogada.
El cierre de Visteon afecta directamente a sus 396 operarios de plantilla y a una decena de empresas proveedoras, con otros 500 empleados. La empresa comunicó el cierre el pasado 23 de junio y ese mismo día cortó el servidor, con lo que la actividad se paró por completo. La Junta, durante varios días, no encontró ningún interlocutor válido de la compañía y amenazó con acudir a la Fiscalía por incumplir la legislación laboral española. Finalmente varios directivos accedieron ayer a reunirse en la sede de la Consejería de Empleo.
El Gobierno andaluz salió satisfecho de la cita porque, aunque la empresa mantiene su intención de cerrar de la planta, ha comunicado su compromiso de negociar esta clausura con los sindicatos. Los encuentros se fijarán a partir de la semana que viene. También se ha comprometido a devolver la faena a los empleados mientras se busca esa salida.
La compañía justifica el cerrojazo en que la planta ya no es viable por el descenso de pedidos ante la crisis de la automoción, aunque los sindicatos denuncian que han desviado la producción a otros países.
Un millar de personas se concentró ayer en El Puerto de Santa María en solidaridad con la plantilla. Les acompañaron otros compañeros afectados por recortes o cierres como los de Delphi, Gadir Solar o Alestis.
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