Paredes bien ilustradas
La empresa familiar Tres Tintas se apunta al retorno del papel pintado con diseños de gran fuerza plástica
Cuando algo resulta odioso es que está a punto de volver. Le ha ocurrido al papel pintado y, aunque parezca impensable, le ocurrirá al gotelé. El minimalismo desterró el papel pintado de nuestras casas, pero, de un tiempo a esta parte, las peladas paredes han sido profanadas con vinilos y también con papeles coloridos.
En 2002, el propietario de la legendaria tienda de Barcelona Papeles Pintados Aribau intuyó esa vuelta. Jaime Bermejo abrió su tienda en 1961, por lo que vivió el auge y caída del medio. Una línea de papeles pintados, poperos, pero actualizados, que la firma alemana Marburg presentó en 2002, le convenció de que se avecinaban tiempos de cambio.
Aquel pálpito le llevó aún más lejos de vender aquellos diseños en su tienda y, con el apoyo de sus hijos Jaime, Alberto y Daniel, creó en 2004 la editora Tres Tintas, con la que empezó a comercializar sus propios papeles. No era la primera vez que Bermejo se metía a elaborar sus creaciones, pues en los setenta ya había montado una fábrica con la que producía sus propias colecciones. De hecho, la primera propuesta con la que Tres Tintas salió al mercado a principios de 2005 reeditaba algunos de aquellos modelos. Pronto tuvo claro que había que innovar, pues, según Bermejo, "una de las principales causas del declive que había vivido el papel pintado en los noventa fue la ausencia de creatividad en su diseño".
Los diseños de Tres Tintas tienen un estilo muy ligado a la gráfica, la ilustración y el arte contemporáneo. Al ser una editora, pueden mimar mucho más la creatividad, pues la producción se confía a empresas especializadas externas. Así que la principal labor de Jaime y sus hijos, sobre todo de Alberto, que es el director de arte, es esmerarse a conciencia con el diseño de los papeles.
Tras la primera colección, que se llamó Revival y que incluía aquellas composiciones geométricas y hexagonales de los setenta más nuevos modelos florales de trazo sintético, invitaron a diseñadores como Enric Jardí, Sophie Leblanc o el estudio Inocuo a colaborar. "Queríamos hacer diseño y arte", cuenta Alberto.
Esta segunda colección, Déjà vu, recreaba las atmósferas de toda una generación de niños que crecieron entre paredes ilustradas. En la tercera decidieron cambiar de estilo radicalmente. All City Papers fue desarrollada íntegramente por el estudio Inocuo utilizando lenguajes y estilos del arte urbano. Ilustraciones con composiciones muy ricas, pero mucho más abigarradas y de trazo aparentemente más espontáneo que la colección anterior.
Con propuestas eclécticas de diseño contemporáneo, la familia Bermejo buscaba seducir a los jóvenes. "No pretendemos que la gente se empapele toda la casa, sino que empiece probando con una pared solamente, algo sencillo y económico, en torno a 100 euros", cuenta Jaime Bermejo.
Su última propuesta se llama 9 Selvas de Mariscal para Tres Tintas y ha sido realizada por el Mariscal artista, no por el diseñador. Pese a su lenguaje sencillo, los mundos recreados por Mariscal en estos nueve papeles tienen una gran fuerza expresiva. Y funciona como una mirada al mundo que nos rodea, del caos urbano al paisaje de pinos mediterráneo.
La gran diferencia de esta colección con respecto a las anteriores es que está hecha en Nonwoven, por lo que no es de papel, sino de fibras. Aunque el uso de este tejido no permite virguerías en el dibujo, resulta más sostenible y es de fácil instalación.
Precisamente la técnica, según explica Jaime Bermejo, ha permitido que la calidad del papel pintado haya mejorado mucho. Los soportes son de mejor calidad, lavables e ignífugos. Y se pueden, por ejemplo, realizar dibujos de colores metalizados.
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