Negro
Desde que se impuso el lenguaje políticamente correcto está mal visto utilizar el color negro para sugerir algo negativo. Pero yo creo que hoy podemos hacer una excepción. Además, a modo de homenaje. La muerte del preso cubano Orlando Zapata Tamayo nos deja una imagen única televisada al mundo por medio de la bloguera Yoani Sánchez en un alarde informativo. Es una imagen en negro, con apenas el destello del letrero luminoso de la morgue, y desde la penumbra la voz de Reina Tamayo, una mujer negra que nos habla con entereza desde el negro más profundo y nos recuerda la injusticia que significa la muerte de su hijo. Ochenta y seis días alrededor del hambre pasó Orlando Zapata antes de morir. Curiosamente en esas horas se hizo pública una foto de Fidel Castro junto al presidente brasileño, Lula da Silva, donde se le ve con un chándal blanco de la marca Nike, que parece haber sustituido a la marca Adidas en su ropero. Negro y blanco.
En esa intensa jornada, el Gobierno francés logró que un ciudadano de su país secuestrado por los integristas hace ya tres meses fuera liberado en Malí después de trabajosas negociaciones. Para nosotros es un rayo de esperanza sobre la suerte de los cooperantes españoles en manos de los mismos grupos fundamentalistas. Pese a que a menudo surgen disensiones sobre la mejor manera de encarar estos asuntos, creo que por lo general la gente agradece que su Gobierno haga todo lo posible por salvar una vida, que el ser humano quede por encima de estrategias o geopolítica. Que el ejercicio del poder no conduzca a un ciudadano a su muerte sino a su plena libertad. Que se persiga la luz y no el apagón.
La relación entre ambos sucesos evidencia el agotamiento que produce la falta de libertades. Las demostraciones de autoritarismo son, cuando se cobran innecesariamente una vida humana, la muestra más demoledora de debilidad. A cualquier régimen que trate de perdurar en esas condiciones se le irá apagando la luz poco a poco hasta quedarse en la oscuridad total. En el negro absoluto. Orlando Zapata tiñó de negro las noticias, tiñó de negro las pantallas y tiñó de negro cualquier disfraz. Pero negro fue ayer el color de la verdad.
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