43 millones de españoles ya se han conectado a la TDT

"He comido sin ver el telediario por primera vez en mucho tiempo", explica Pedro Pavón, recepcionista de 58 años. Pavón llegó ayer a su casa, en Madrid, a la hora de comer, encendió el televisor -"el de la cocina", puntualiza, "el del salón ya lo tengo adaptado"- y la pantalla le mostró el siguiente mensaje: "La programación de televisión analógica ha dejado de emitirse por este canal. Puede seguir visualizando este programa en TDT. Más información en el 901 201 004".

Madrid, Barcelona y Sevilla se despedían ayer de la televisión analógica. Ya son 43 millones de ciudadanos los que pueden hacer uso de la TDT, tras el cese de las emisiones analógicas de centros como Torrespaña (Madrid), Collserola (Barcelona) y Valencina de la Concepción (Sevilla), en esta última fase del apagón analógico que finaliza el 2 de abril.

Miguel Sebastián: "La televisión digital es calidad y cantidad"

Las incidencias, mínimas, no fueron técnicas sino atribuibles al usuario

El próximo viernes el fin de la transmisión analógica será una realidad en todo el país, con la incorporación de Vigo, Lugo y Pontevedra en Galicia; Santa Cruz de Tenerife y la isla de La Palma en Canarias; Gijón y Oviedo en Asturias y León y Salamanca en Castilla y León. Las dos primeras fases del apagón afectaron a 15 millones de ciudadanos en 3.940 municipios; la última afectará a 31 millones en 4.172 municipios.

En Andalucía, 523 municipios abandonaron ayer el sistema analógico, que afectó principalmente a las provincias de Granada y Sevilla. En Cataluña, casi cuatro millones de personas dejaron de recibir la señal analógica. El apagón en la zona pirenaica de Lleida y las localidades de la costa de Girona suma otros tres millones de personas.

El despertar digital es "un hecho comparable a la aparición de la televisión en 1956", señalaba ayer el ministro de Industria, Miguel Sebastián, durante el acto de bienvenida a la TDT en el ministerio. "La TDT es cantidad y calidad", afirmó. Calidad, porque se cambia una señal con rayas, nieve e interferencias por otra con mayor calidad de imagen y sonido, explicó el ministro; cantidad, porque se pasará de 6 a 30 canales de ámbito estatal antes de que finalice el año. Además, la era digital, supone "nuevos servicios, alta definición e interactividad".

La cobertura de la televisión digital alcanza en sus canales públicos al 98,79% de la población, frente al 98,6% de la etapa analógica; los privados, al 98,36% frente al 97,1% en analógico, según explicó el secretario de Estado de Telecomunicaciones, Francisco Ros. El porcentaje de población al que no da cobertura el nuevo sistema se situaría entre el 1,2% y el 1,6%, que se cubre a través de satélite, según fuentes ministeriales. Al final del proceso, se prevé que sólo el 0,5% reciba la señal vía satélite.

"Hay que quitar dramatismo", incidía Ros refiriéndose al hecho de que haya gente sin TDT (un 2%, a pesar de recibir la señal). Son "decisiones individuales", el problema sería que "no hubiera información o la señal no llegara". En cuanto a los fallos en el funcionamiento, Ros aseguró que "el número de incidencias está siendo mínimo; los problemas se relacionan más con la adaptación del usuario que con la señal".

Entre marzo de 2003 y febrero de este año se han vendido casi 28,5 millones de descodificadores, según datos de Asimelec, la patronal del sector de la electrónica. Además, se calcula que se ha vendido otro millón y medio de televisores con la TDT incorporada, lo que hace un parque de 30 millones de televisores adaptados. Actualmente, todos los televisores que salen al mercado llevan TDT integrado.

El tránsito a la televisión digital terrestre ha movilizado 12.000 millones de euros, ha creado 40.000 empleos y ha generado actividad en más de 10.000 empresas del sector TIC.

Para personas con riesgo de exclusión -mayores de 65 años con dependencia reconocida y mayores de 80 que vivan solas y tengan discapacidad sensorial- Industria ha cedido más de 130.000 equipos, dijo el ministro.