_
_
_
_

Un informe científico alerta del vertido continuado de Sogama a un río

El juez investiga a la planta de Cerceda por un delito medioambiental

El pasado 19 de octubre, 3.000 ejemplares de truchas aparecieron muertos en el río Lengüelle a su paso por Cerceda. Lo denunció un vecino de Ordes que aquel día tomó fotos del cauce repleto de espuma. El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil siguió la pista a los vertidos y acabó en la planta de tratamiento de residuos de la Xunta en Xesteda, término municipal de Cerceda. La denuncia del Seprona la investiga ahora el Juzgado de Instrucción número 1 de A Coruña que persigue un delito medioambiental.

Lo primero es delimitar al responsable de los vertidos ilegales, puesto que son varias subcontratas las que gestionan el complejo de Sogama, la sociedad pública adscrita a la Consellería de Medio Ambiente. De momento, la Guardia Civil ya ha tomado declaración a un grupo de trabajadores y directivos de Danigal, la sociedad a la que Sogama ha adjudicado el tratamiento de los residuos en Cerceda. Lo ha hecho después de descubrir en las inmediaciones de la depuradora de la planta de tratamiento una tubería de hormigón que vierte directamente al manantial donde nace el río Areosa, afluente del Lengüelle, que a su vez desemboca en el Tambre. En distintas visitas al entorno del cauce, los agentes han tomado fotos y comprobado la existencia de espumas que retratan en el extenso material con que acompaña al atestado.

Investigadores de la Universidad han detectado metales pesados en el cauce

Según la documentación que figura en la Xunta, Danigal cuenta con un permiso de Augas de Galicia, un organismo autónomo que depende también de la Consellería de Medio Ambiente, para canalizar el agua limpia que sale de sus instalaciones y devolverla al Lengüelle.

Pero la Guardia Civil ha constatado que ese caño de cemento transporta algo más que líquidos depurados. Así lo prueba un informe elaborado por el Departamento de Edafología y Química Agrícola de la Facultad de Farmacia y que también está en poder del juez.

Después de analizar el perímetro exterior de la planta de Sogama contiguo al tubo, ha detectado "una clara contaminación con presencia de nitrógeno inorgánico, fósforo y gran heterogeneidad de sedimentos". El contundente informe de los científicos de la Facultad de Farmacia concluye que se trata de un "vertido continuado" que está provocando la "eutrofización del cauce del río". Ese término técnico define la ausencia de oxígeno en el agua como consecuencia del "enriquecimiento de metales pesados" que esquilma toda la fauna fluvial.

Eso explicaría la muerte masiva de salmónidos del mes de octubre que motivo la denuncia de la que parte la investigación. Que no se trate de un hecho puntual sino de prácticas habituales agravaría el delito, según fuentes próximas al caso.

El atestado de la Guardia Civil también destapa la proliferación en el entorno del Lengüelle de aves muertas, "minerales viscosos y gran contaminación". Los investigadores apuntan dos posibles causas para explicar la polución que tendría como origen un fallo en el sistema de depuración de la planta de residuos o una fuga en la balsa donde se depositan los lixiviadores.

Poco después de que se sucediera el vertido, tanto la Consellería de Medio Ambiente como Sogama y también Danigal exculparon su actuación en este caso. Una vez realizados los primeros análisis, Augas de Galicia descartó la responsabilidad de la Xunta. Y la subcontrata Danigal advirtió a través de uno de sus directivos que entre sus responsabilidades no se haya el mantenimiento de la depuradora.

El grupo municipal del BNG en Cerceda fue la primera fuerza política en censurar los vertidos y desde entonces el PP no ha dejado de denunciar en el Parlamento gallego la contaminación de Sogama. Su presidente, José Álvarez Díaz, instó a los populares a pedir su comparecencia en el Parlamento gallego donde se comprometió a explicar "con la transparencia que merece la opinión pública" su actuación al frente de la sociedad pública.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_