"Lo incómodo no interesa"
La ganadora de un premio de investigación sobre la Sección Femenina espera su premio desde hace dos años
No existe ningún trabajo publicado que se ocupe de estudiar la Sección Femenina y su repercusión en Galicia. Pero Victoria Martins, historiadora de la Universidade de Vigo, sabe que la afiliación a la rama femenina del falangismo fue muy baja, principalmente por el carácter elitista de la organización. Las relaciones que las mujeres del ámbito rural gallego mantenían con la Sección Femenina eran un mero trámite. Se producían casi exclusivamente por la "necesidad de recurrir a su ayuda material, ya que había una carencia absoluta de recursos, o simplemente por sobrevivir sin tener que enfrentarse al poder establecido".
Estas son las conclusiones de Martins tras la pionera investigación A muller no franquismo. A Sección Feminina en Ponteareas 1936-1955, que llevó a cabo con motivo del concurso Fermín Bouza Brey, convocado por el Ayuntamiento de Ponteareas para promover la investigación sobre la comarca. Sin embargo, y a pesar de la novedad del tema, no hay ningún indicio de que este trabajo vaya a salir a la luz. La incertidumbre acerca de la rentabilidad económica parece haber sepultado esta vez un trozo de la historia de las mujeres de O Condado en concreto, y de Galicia en general. El ayuntamiento elude responsabilidades y se lava las manos: no cree que tenga que colaborar para que el trabajo se publique. Además, la ganadora de la cuarta edición del concurso lleva casi dos años esperando para recibir los 1.500 euros que figuran como premio en las bases. Martins explica que el jurado que le otorgó la distinción está compuesto en su mayoría por organismos independientes del Ayuntamiento. "Están en minoría, solo el 25% son miembros del gobierno local". Una vez que el jurado dio el visto bueno al tema propuesto para investigar, Martins también debería haber recibido 500 euros para realizar el trabajo, pero se los ingresaron un año y medio después de haber comenzado su indagación. "Yo estaba trabajando sin saber si el Ayuntamiento se iba a implicar, decidí comunicar a la prensa mi situación y una semana después me ingresaron el dinero", explica la investigadora. El concejal de Cultura de Ponteareas, Andrés Sampedro, explica que estos retrasos se produjeron porque el premio no estaba presupuestado. A pesar de ello, el gobierno local ya tuvo oportunidad de reservar la cantidad del premio cuando aprobaron los presupuestos para el 2010. "A esas alturas ya llevaban meses debiéndome el dinero", cuenta la afectada. Según Sampedro, se pusieron en contacto con ella "en muchas ocasiones" para explicarle la situación, hecho que Martins desmiente.
El Ayuntamiento de Ponteareas justifica el retraso por la falta de presupuesto
Se trata del primer trabajo sobre la mujer y la Falange en Galicia
La afectada se queja de que el Gobierno local no muestre interés por que el trabajo se publique, ya que podría comprometerse con una editorial a comprar algunos ejemplares para la biblioteca municipal. Esto contrasta con la primera edición del concurso, cuando el trabajo ganador, que estudiaba una cuestión etnográfica, fue publicado por la Diputación de Pontevedra. Los problemas comenzaron en la tercera edición. El ganador, Ángel Rodríguez Gallardo, estudió la represión franquista en la comarca y, según el investigador, el Concello se desentendió de la publicación del trabajo. Fue él por su cuenta quien se encargó de buscar una editorial. "De hecho, ni siquiera aparece el logotipo del Concello en el libro". Ediciós do Castro se hizo cargo de la publicación, a cambio de que el ayuntamiento comprase 100 ejemplares. Según explica, al principio se comprometieron, pero en el momento en el que se quisieron poner en contacto con el ayuntamiento para venderle los libros, simplemente no cogieron el teléfono. La ganadora de la última edición no tiene la más mínima esperanza de ver su trabajo publicado. Desde el concello señalan que todo está "en manos de la Diputación".
El trabajo tampoco se ha presentado en público, recompensa que también se recoge en las bases del concurso. En cuanto a las razones, a la afectada se le ocurre que "no interesa dar luz a cuestiones que les resultan incómodas, se hacen mil actividades culturales y mi trabajo ni se ha presentado, y eso no creo que dependa de los presupuestos". El concejal de Cultura insiste en que los incidentes se deben solo a motivos presupuestarios. "Esta chica quiere polémica, pero yo no voy a entrar en guerras políticas", comenta. La investigadora señala que el trabajo no puede herir a ningún descendiente de las personas que se nombran en el libro, no crea ningún conflicto entre vecinos. "El conflicto lo están creando desde el Ayuntamiento sin ninguna necesidad", lamenta.
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