Baltar, la diócesis y las termitas

A mediados del año pasado, un albañil bien amarrado a unos arneses se subió al tejado de la catedral de Ourense. El operario echó una ojeada por el cimborrio del principal monumento de la ciudad, dedicado a San Martiño, y bajó en un suspiro. No encontró el origen de las filtraciones que, desde hace años, diluyen el emblemático Pórtico del Paraíso.

El Gobierno de Feijóo no tiene más presupuesto que el del salario que pagó al operario para combatir la comunidad de bacterias que se comen -mientras se reproducen felizmente- la policromía de la basílica, uno de los referentes del románico gallego. Junto al batallón microscópico que va ganando la batalla, la humedad supura por los murales, del siglo XVII. El asedio es de tal calibre, que las filtraciones descomponen también el granito del crucero, del siglo XII, y el monumento sucumbe en pequeños montículos de arena que el archivero de la catedral asegura que limpia cada día en la capilla del Santo Cristo y en el entorno del altar mayor, sobre el que se han desplomado ya pequeños trozos.

Las bacterias se comen la policromía de la basílica románica

El Ayuntamiento insta al Gobierno de Feijóo a que pague los trabajos

A la batalla contra las inclemencias y las termitas se ha sumado recientemente Baltar. El presidente de la Diputación de Ourense se ha puesto inmediatamente del lado de la sociedad ourensana y de la diócesis. Esto es, en abierta oposición al PP. De tal forma, que la presión del agua y las termitas se come también la pátina de unidad que quieren presentar los populares.

"Hay que presionar a la Xunta", indicó con autoridad José Luis Baltar al representante del cabildo durante una visita institucional a la catedral. De paso, le recordó que el Gobierno de Feijóo había comprometido una inversión para 2010 "y no hubo ninguna actuación".

El compromiso de la Xunta lo había hecho público su representante en Ourense, Rogelio Martínez, al anunciar que Patrimonio destinaría 60.000 euros a un estudio del origen de las filtraciones. Ya lo habían anunciado el año anterior.

Pero el gerente de la Sociedad de Xestión del Xacobeo, Ignacio Santos, fue explícito en una visita a Ourense el año pasado. Santos precisó que no se dedicaría un euro a la rehabilitación del histórico monumento, pese al acuerdo del bipartito de destinar 250.000. "Lo invertiremos todo en actividades culturales, así como en la mejora de los distintos caminos del Xacobeo", indicó el representante de su gestora.

El delegado de Patrimonio de la diócesis, Miguel Ángel González, no da crédito a la desidia. El año pasado envió un escrito a la subdirectora general de Cultura para preguntar por la fecha prevista para el inicio de las obras.

Pero a estas alturas, nadie sabe si las humedades proceden de las paredes laterales del templo, de la parte inferior, ya que podrían ascender por capilaridad al pavimento, o incluso del tejado al que se subió el año pasado el albañil para echar un vistazo sin detectar nada.

Ayer, en comisión de Cultura, el BNG consiguió que se aprobara por unanimidad una proposición no de ley por la que se insta a la Xunta a que inicie los trabajos de rehabilitación. Pero el compromiso es el de acometerlos "antes de junio de 2010". El PP rechazó la propuesta de enmienda del BNG, respaldada por el PSOE, para actualizar la fecha a junio de 2011.

El portavoz popular en la comisión, Ignacio López Chaves, abroncó a la diputada nacionalista que defendió la propuesta, Tereixa Paz. "Esto no es un error de redacción", concluyó López.

Los populares aseguraron que se han realizado intervenciones en la catedral en 2010 y aprobaron una enmienda propia que cambia la petición a la Xunta. Se le reclama que "continúe con los estudios que está realizando" para poder valorar el inicio y el presupuesto de las intervenciones. El año pasado, el Parlamento aprobó por unanimidad otra iniciativa del BNG por la que se comprometía a iniciar en un plazo de cuatro meses la rehabilitación.

Las termitas siguen comiendo las figuras policromadas. Estos días no hay charcos porque no llueve y Baltar se pone frente al movimiento popular y diocesano para presionar al Gobierno de su partido. Pero la Xunta tiene un plazo caducado de antemano para hacer un estudio que determine qué hay que rehabilitar.

Mientras tanto, el delegado patrimonial de la diócesis encarga la recogida de la basura de la cubierta, la retirada de la maleza y la reposición de las tejas que se van rompiendo. Lo hace todos los años, mientras el Pórtico del Paraíso se convierte en arena. "Se podría salvar", ha reiterado, reclamando una "urgente restauración".

Molesto con la actitud del PP en la Xunta, González ha dicho ya que la Consellería de Cultura ha dado "la espalda tajantemente a la provincia". No se refería sólo al abandono del patrimonio religioso, sino a la "falta de programación cultural" del Xacobeo en la que la Xunta había priorizado su inversión.