Emarsa pagó circuitos de spa, ropa y tabaco a sus directivos

Emarsa va camino de convertirse en uno de los peores ejemplos de uso de dinero público destapados en Valencia. La sociedad de depuración del agua, dirigida por cargos del PP desde los años noventa, controlada por el Ayuntamiento de Valencia y exprimida por sus gestores hasta llevarla a la quiebra con un agujero de 17 millones, costeó todo tipo de excesos. Un nuevo paquete de facturas incorporado al sumario desvela que sus directivos cargaron a Emarsa el disfrute de circuitos de spa; 4.414 euros por una sola comida; la compra de bolsos de Loewe (alguno de 1.100 euros); prendas de vestir; palas de pádel; un cesto para bebé (adquirido en una tienda de Madrid y con sobrecoste por entregarlo ese mismo día en Valencia) e incluso el tabaco. El máximo responsable de Emarsa en la etapa investigada, Enrique Crespo, a quien el juez ha imputado por malversación, estafa continuada y delitos societarios, sigue siendo vicepresidente de la Diputación de Valencia y alcalde de Manises con el PP.

La investigación ha revelado que la sociedad pública pagó cantidades millonarias, quizá más de 30 millones de euros, por servicios y suministros falsos.

Emarsa se financiaba a través del canon de saneamiento, incluido en la factura del agua que los vecinos de Valencia y 18 pueblos próximos pagan cada dos meses. La aportación directa de los fondos a la sociedad la hacía, sin embargo, la Generalitat a través de su entidad Epsar. Ésta triplicó la inyección económica a Emarsa durante los años en que fue saqueada, sin que el volumen de agua residual depurada, que sólo creció un 6,5%, justificara el aumento.

Las nuevas facturas, que incluyen por ejemplo una comida en el Asador 7 de julio de Manises por importe de 2.865 euros, propina de 48 euros aparte, están firmadas en algunos casos por el exgerente de la sociedad, Esteban Cuesta. La mayoría de ellas llevan el cuño de "Conforme. Cantidad, calidad y precio" del departamento administrativo financiero de la empresa pública.

El exdirector financiero de Emarsa era Enrique Arnal, exedil de Unión Valenciana en Montcada. Arnal, supuestamente uno de los principales autores del saqueo, fue fichado como directivo de Emarsa en los años noventa por Vicente Jurado, entonces presidente de la sociedad. Jurado, hoy concejal de Alumbrado en el equipo de gobierno de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, fue sustituido por Silvestre Senent, que es edil de Hacienda en el mismo Ayuntamiento y preside el PP de la ciudad de Valencia. Crespo relevó a Senent en 2002. La sociedad fue liquidada por quiebra en 2010.