¿Cómo conecta la universidad a los estudiantes con el mundo laboral?
Las prácticas laborales sirven de entrenamiento al estudiante antes de lazarse al mercado, pero antes conviene que preste atención a factores como la cantidad y el tipo de empresas que elige para encauzar su futuro profesional
Todos los alumnos obtienen las mismas titulaciones. Por eso, una manera de diferenciarse, antes de lanzarse a la búsqueda del primer empleo, es realizar prácticas laborales durante la carrera.
Estas actividades acercan al estudiante al mundo del que formará parte en pocos años y le proporcionan herramientas para integrarse en él. “Adquiere esas soft skills o habilidades blandas típicas, como son el trabajo en equipo, las habilidades de comunicación, además de la empatía, la capacidad de organización y la responsabilidad”, asegura Sergio Calvo, vicerrector de la Universidad Europea de Madrid.
Esta institución tiene convenios de prácticas con 6.000 empresas. Entre ellas hay grandes multinacionales, pero también empresas familiares. Buena parte de los alumnos, de acuerdo con Calvo, se inclina a hacer prácticas en grandes empresas, por su proyección internacional y su prestigio. El perfil del estudiante es lo que determina que acaben en una u en otra. “Dependiendo de cuál sea su objetivo curricular, dependiendo si piensan emprender o no, nosotros, a veces, recomendamos empresas más pequeñas en donde puedan desarrollar más sus competencias”, completa Calvo.
El vicerrector recomienda que, además de las prácticas curriculares que el estudiante debe realizar para completar su programa de estudios, es conveniente que haga otras extracurriculares, que no son obligatorias, para reforzar su experiencia y resultar más atractivo para las empresas.
