Lista para hacer negocios
Para muchos estudiantes de la Florida, asistir a la universidad les brinda la oportunidad de una vida mejor para ellos y sus familias. Para algunos estudiantes, como Markemia Peterson, no era solo la oportunidad de tener una vida mejor, sino una forma de ayudar a su comunidad a crecer
Markemia Peterson creció en el área rural cerca de Tallahassee, parte de una familia que luchaba para que el dinero alcanzara. Fue criada por una madre soltera de tres hijos que siempre se aseguraba de que tuvieran todo lo que necesitaban. “Crecí en el campo, detrás del aeropuerto de Tallahassee, así que realmente soy una chica de campo. Ya sabes, motos de cross, pesca, cosa por el estilo”, dice Markemia. “Al crecer, no tenía mucho, pero mi mamá siempre se aseguraba de que, aunque no tuviéramos en abundancia, no nos diéramos cuenta”.
Markemia soñaba con ir a la universidad desde que era pequeña, pero sabía que no sería fácil. “Prácticamente, he estado pensando en la universidad desde que estaba en la escuela primaria y ya sabía de antemano que tendría que tener una beca para ir a la universidad. Cuando la gente dice ‘ahorra dinero para invertir en el futuro de tus hijos’, muchos de ellos no entienden que si tienes que usar el dinero que ganas cada dos semanas para pagar tus cuentas, tu alquiler y tu seguro, no te queda dinero para ahorrar en una cuenta bancaria para alguna emergencia. Entonces, siempre supe desde muy, muy joven que iba a tener que obtener una beca”.
Al principio, como cualquier adolescente, Markemia batalló para concentrarse durante la escuela secundaria y abandonó el Programa de Bachillerato Internacional (IB, por sus siglas en inglés) que le habría ayudado a asegurar una beca. Pero, rápidamente se dio cuenta de que tenía que desafiarse a sí misma si realmente quería ir a la universidad. “Sacaba solo 10 en las clases regulares y no me desafiaba realmente. Una maestra mía, la señorita Young, nunca la olvidaré, se sentó y habló conmigo, de mujer negra a mujer negra, y me hizo entender que no me estaba desafiando a mi misma lo suficiente, y si seguía en el mismo camino, entonces no iba a ir a ningún lugar espectacular ni a ser nada grandioso. Fue entonces cuando realmente me di cuenta”. Markemia volvió a solicitar el programa IB y pudo obtener una Beca Bright Futures que le ayudaría a ir a la universidad.
Cada año, miles de estudiantes ven recompensado su arduo trabajo con una Beca Bright Futures, parte de los esfuerzos realizados por la Lotería de la Florida para garantizar un mejor mañana para los estudiantes de todo el estado. Cuando los jugadores de la Lotería compran billetes, ayudan a financiar estas becas, para que los jóvenes puedan lograr sus sueños de una educación superior.
“Sin la Beca Bright Futures, todo hubiera sido horrible, hubiera sido muy malo... Simplemente hizo mi vida mucho más sencilla porque yo tuve que pagar mis propias facturas mientras crecía. Muchos niños podían llamar a sus padres y decirles ‘Oye, ¿puedes enviarme dinero para comer? o ¿puedes pagar el alquiler este mes?’. Yo no tuve ese lujo porque mi mamá y mi abuela tenían sus propias cuentas que pagar”. La beca le dio a Markemia la seguridad de que podía ir a la escuela y pagar para asistir a estas clases. “No solo eso, sino que no tenía que trabajar todo el tiempo. Tenía un trabajo en la universidad, pero no ocupaba todo mi tiempo, así que tuve la oportunidad de estar en estos clubes, programas y organizaciones que me colocaron en la posición que estoy hoy”.
El futuro luce bien para Markemia. Se graduó de la Universidad de la Florida con títulos en Marketing y Emprendimiento e inmediatamente comenzó a abrirse camino en el mundo empresarial. “Como dije, era una chica de campo, pero siempre quise ser una persona de negocios de la ciudad. Creo que el hecho de nunca haber experimentado eso, me hizo quererlo más”.
Además de su trabajo de 9 a 5 en tecnología, trabajando con clientes ayudándoles a diseñar cuál es la mejor estrategia tecnológica, Markemia también dirige una empresa de entretenimiento que organiza festivales y conciertos, además de administrar a dos artistas. Ella realiza todas estas actividades con metas muy específicas en mente. Quiere ayudar a su comunidad a crecer, así como su comunidad la ayudó a ella a crecer. “Creo que hay una gran posibilidad de crecimiento, porque algo que he notado es que la gente de mi comunidad no tiene gente a la cual acudir para buscar consejos. No tienen socios comerciales o personas que hayan ido a la universidad o que sepan cómo administrar con éxito un negocio o ser emprendedores o algo por el estilo. Entonces, muchas de las cosas que estoy haciendo de forma paralela, las estoy haciendo pro-bono. Realmente no gano mucho dinero con eso, y el dinero que gano lo estoy devolviendo a la comunidad”. Markemia ofrece su tiempo como voluntaria para actividades como colectas de alimentos, parrilladas comunitarias y cortes de cabello gratuitos para niños de forma regular.
Markemia ahora está utilizando las conexiones que hizo en la industria de la música, no solo para ayudar a los artistas locales que administra, sino también para ganarse la vida y ayudar a las personas que la rodean. “Hacer esas conexiones y traerlas de vuelta a las bandas y los artistas que administro ha sido realmente bueno porque todo lo que estoy haciendo, puedo devolverlo a la comunidad. No solo eso, sino que ahora estoy ganando dinero. Entonces, puedo proporcionar becas, proporcionar cosas a otras personas. Todo lo que estoy haciendo tiene un impacto, y puedo usar lo que tengo para ayudar a otros a llegar también a donde necesitan estar”.
Es un viaje muy largo para una chica campirana, pero sabe que cualquiera puede lograrlo. “No dudes nunca de ti mismo. Nunca pienses que tienes que estar encasillado y tienes que ser médico o abogado. Trata de aprovechar tantas experiencias como puedas, aprovecha cada oportunidad, cada oportunidad que se presente. Especialmente para las minorías subrepresentadas que pueden no tener tanto dinero, asegúrense de aprovechar esos programas de tutoría gratuitos, esas oportunidades gratuitas, esos programas gratuitos de promoción profesional, porque esas son probablemente las cosas más importantes que me ayudaron una vez que llegué a la universidad para estar donde estoy hoy. Literalmente, hay un trabajo para todo, así que inténtalo todo y descubre lo que te gusta. Está bien si no lo tienes todo resuelto en este momento, te prometo que se resolverá al final”.