Con estas marcas de batas podrías hasta salir a la calle (pero no lo hagas)

Tekla Los albornoces de Tekla ya están entre los favoritos de armarios tan admirados como el de Harry Styles o Alexa Chung, que ya los han lucido en Instagram. Con sede en Copenhague, esta marca fundada por Charlie Hedin en 2017 (antes trabajó para firmas como Acne) ha logrado hacerse un hueco gracias al ADN escandinavo de sus diseños y la calidad de sus materiales que, apostando por la sostenibilidad, visten el hogar de comodidad. El precio de sus albornoces ronda los 160 euros dependiendo del modelo.

Sleeper Parece un vestido, pero es una bata. Inspirada por los iconos de los años noventa y, sobre todo, por los estilismos de aeropuerto, esta firma apuesta por pijamas y ropa para estar en casa que bien podría pasearse a la calle (cuando vuelva a ser posible). Prescriptoras de todo pelaje son fanáticas de sus diseños, algo fácil de entender teniendo en cuenta que sus fundadoras fueron editoras en revistas de moda.

Yolke Desde su lanzamiento en 2013, Yolke no ha dejado de ganar adeptas gracias a sus pijamas de lujo (los conjuntos de parte de arriba y pantalón superan los 300 euros). La seda es seña de identidad de la marca, así como los apetecibles estampados que tiñen camisones, vestidos y, por supuesto, batas.

Oysho La firma lencera también tiene en su catálogo batas cortas tan apetecibles como esta de margaritas (25 euros) o en versión larga (foto de apertura, a la izquierda). La comodidad y el estilo están asegurados.

Morpho + Luna Como explicaban sus fundadoras a S Moda, el punto de partida de Cécile Gavazzi y Carola Voli a la hora de diseñar es la materia prima. «Nos enamoramos de un tejido y, a partir de ahí, creamos la colección». Y ese es precisamente su fuerte: estampados especiales en tejidos de gran calidad y fabricación Made in Italy. Sus batas no son asequibles (rondan los 700 euros), pero es posible hacerse con algunos modelos rebajados.

Love Stories La marca holandesa (con dos tiendas físicas en nuestro país en Madrid y Barcelona) es responsable de los conjuntos lenceros más cómodos, actuales y milénicos. Los sujetadores sin aro que combinan tejidos y estampados son marca de la casa, que también crea pijamas y batas tan bonitas como esta (130 euros).

Albertine Herederas de la tradición corsetera iniciada por su bisabuelo, las hermanas Anémone y Caroline están detrás de esta firma centrada en ropa de baño y lencería. Además de una selección de bañadores de lo más recomendable, sus pijamas y batas bien merecen una visita a su tienda online. El modelo de la imagen está rebajado de 120 a 72 euros.

Namur Nacida en Madrid bajo la batuta de una madre y una hija, los diseños de Namur respiran algo de esa cotidianidad familiar tan reconfortante en estos momentos. "Feminidad, sutileza y elegancia", como ellas mismas dicen, son las claves que definen sus kimonos, batas y batines. Además de encontrar diseños perfectos para novias, también tienen modelos estampados perfectos para pasar las largas jornadas de confinamiento. La bata de la imagen cuesta 200 euros, pero en su web tienen varios diseños con descuento.

Desmond & Dempsey Ajustar las camisas masculinas de él a la silueta femenina de ella y reimaginarlas después para el dormitorio. Así surgió esta firma capitaneada por un matrimonio y bautizada con los apellidos maternos de ambos. ¿Su punto fuerte? Estampados propios que crean durante sus viajes. Sus batas rondan los 300 euros y también tienen coloridos albornoces de rayas.

Fleur du mal Bautizada igual que la famosa colección de poemas de Charles Baudelaire, Fleur du mal encarna la sensualidad más extrema de todas las firmas de la lista. Pero demás de transparencias y encajes, la marca también apuesta por batas estampadas para todos los públicos como esta en blanco y negro. ¿Quién no se pasaría así el día viendo Netflix?