Ir al contenido
_
_
_
_

México, a contrarreloj para salvar el TMEC: una consulta pública de 60 días, un amago arancelario y China en el punto de mira

La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, ha celebrado el arranque del proceso de revisión del tratado y ha defendido la integración comercial de Norteamérica

El puerto de Manzanillo, en abril de 2025.
Karina Suárez

México ha dado el banderazo de salida al proceso de revisión TMEC, el tratado comercial más importante de Norteamérica. El gobierno de México ha abierto una ventana de 60 días de consulta pública para que cualquier persona o grupo emita su opinión sobre el acuerdo comercial signado con EE UU y Canadá, un paso que forma parte de la evaluación mayor del tratado en julio próximo. La Secretaría de Economía ha habilitado un sitio web y un correo electrónico para que los interesados puedan emitir sus comentarios sobre el impacto del acuerdo, en específico, sobre las reglas de origen, procedimientos aduaneros, temas laborales, ambientales y de pequeñas y medianas empresas, propiedad intelectual, comercio digital, inversión, entre otros. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, indicó que se abordarán en estas consultas los recientes aranceles impuestos por EE UU, así como temas laborales entre los tres países. “Queremos mantener el TMEC”, declaró este miércoles en Palacio Nacional.

En 2020, cuando se firmó el acuerdo comercial, se estableció que cada seis años se someterá a evaluación por parte de los tres países firmantes, una fecha que vence en julio próximo. Ahora, en plena guerra arancelaria de la Administración Trump con el mundo, la revisión del TMEC supone una prueba de fuego para los tres países firmantes. En el caso de EE UU, la Oficina de Representación Comercial (USTR, por sus siglas en inglés) ha dado un plazo de 45 días para llevar a cabo la consulta pública y ha anunciado que el próximo 17 de noviembre se celebrará una audiencia para dar a conocer los capítulos que EE UU desea revisar y la dirección que busca darle al TMEC en los próximos años. En reiteradas ocasiones, el presidente Donald Trump ha cargado contra el acuerdo y ha amenazado con cancelarlo por considerar que contraviene los intereses de los estadounidenses.

México, por el contrario, ha abogado desde un inicio por mantener la integración comercial de Norteamérica, bajo el amparo del TMEC. La defensa del acuerdo se sustenta en las cifras: a pesar del muro arancelario de Donald Trump, México sigue siendo el principal socio comercial de Estados Unidos, al enviar a ese mercado más del 80% de sus exportaciones. Durante el primer semestre del año, los envíos rebasaron los 309.000 millones de dólares, mientras que las importaciones estadounidenses ascendieron en este periodo a 197.000 millones de dólares. En la mesa del próximo julio de 2026 se decidirá si el TMEC continuará por los próximos 16 años o no.

El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, aseguró la tarde de este miércoles después de un evento que el TMEC prevalecerá, aunque reconoció que el proceso de revisión será “difícil” y “nada sencillo”. El funcionario reconoció que en el caso de México la política arancelaria de EE UU y las reglas de origen del sector automotriz serán dos temas prioritarios de las consultas. “Vamos a escuchar a todos los sectores, a las industrias, al movimiento obrero, cualquier persona que quiera puede enviar sus ideas y nosotros las tomaremos en cuenta y si se requiere más tiempo, se puede ampliar”, detalló. La Secretaría de Economía reunirá en noviembre próximo las sugerencias y redactará un documento tanto para la presidenta Sheinbaum como para el Senado, una vez avalado por ambas partes, se llevará a las mesas de revisión en julio de 2026.

En aras de mantener esta integración regional, México anunció a principios de septiembre una serie de medidas para contener el avance de las importaciones asiáticas. El gobierno de Sheinbaum decidió imponer aranceles de hasta 50% a las importaciones provenientes de China y de países con los que no existen acuerdos comerciales vigentes. La medida busca reducir el avance de los productos asiáticos en sectores clave en el país como son el acero, textiles, calzado, juguetes y automotriz, a la vez que supone un gesto en la misma línea de la política comercial de Washington frente al gigante asiático.

Ignacio Martínez Cortés, coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la UNAM, señala que, a diferencia de las reglas que publicó este martes la USTR que son más precisas, las bases de México son sumamente escuetas bases lo cual puede dar margen a la negociación y a no comprometerse. El experto advierte de que el término de estas consultas públicas tendrá lugar en paralelo al fin de la pausa arancelaria que EE UU concedió a México en julio pasado y con la que el país latinoamericano logró esquivar el aumento de aranceles al 30%. Este impasse arancelario vence el próximo 30 de octubre. De esta forma, indica Martínez Cortés, el amago arancelario del republicano se mantiene y será un factor decisivo en el proceso de revisión del TMEC.

Desde su perspectiva, EE UU tiene como principal preocupación comercial el limitar la participación de empresas chinas con México, la imposición de aranceles a los productos chinos y la modificación de las reglas de origen del sector automotriz para cerrar el paso a la exportación de autos chinos a EE UU desde México. “Washington ejerce cada vez más presión a México, el país ha cedido en la mayoría de las amenazas latentes frente a Trump y eso ha afectado a sectores productivos como los recientes aranceles a industrias estratégicas como el acero y aluminio”, añade. En este momento, las exportaciones mexicanas a Estados Unidos fuera del TMEC pagan un arancel del 25%, el acero y el aluminio pagan una tarifa del 50%, los tomates deben pagar una cuota compensatoria del 17%, entre otros.

El consultor económico Pedro Tello hace hincapié en que la revisión del TMEC no es un trámite técnico-comercial más, para México es un punto de inflexión que definirá el futuro de la actividad productiva e industrial del país y la integración económica en América del Norte. “En un contexto marcado por presiones arancelarias desde Estados Unidos, este proceso ofrece la oportunidad de reconstruir un entorno comercial trilateral basado en la certidumbre jurídica, la legalidad y la competitividad real. Por ello, es indispensable que todos los sectores participen: academia, empresarios, productores del campo, trabajadores y autoridades”, menciona.

La Administración Trump ha jugado desde su arranque una estrategia de desgaste, vía los aranceles, para llegar con una mejor posición a las puertas de esta negociación frente a México y Canadá. Pese a ello, la estrecha relación comercial entre los tres países y la posición geográfica son algunos de los factores que tendrá a su favor el gobierno de México para rescatar, a contrarreloj, al TMEC.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Karina Suárez
Es corresponsal de EL PAÍS en América, principalmente en temas de economía y sociedad. Antes trabajó en Grupo Reforma. Es licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y Máster de periodismo de EL PAÍS.
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_