El Atlante regresará a la Liga MX en 2026
El histórico club de Ciudad de México volverá a Primera División tras 11 años, en reemplazo del Mazatlán del empresario Ricardo Salinas Pliego


El equipo de los obreros de Ciudad de México, aquel que nació en el actual barrio de la Condesa, el que viste de azulgrana y que colecciona mudanzas, volverá. Es el Atlante. Se trata de un equipo centenario (107 años) que pasó los últimos 11 años en una Segunda División que dejó de ofrecer la posibilidad de ascender a Primera desde 2020. El club tomará, a partir de 2026, el lugar del Mazatlán, propiedad del empresario Ricardo Salinas Pliego, quien alista su salida del fútbol mexicano.
Mikel Arriola, comisionado de la Federación Mexicana de Fútbol, confirmó este martes el acuerdo de venta de Mazatlán con el dueño de Atlante, Emilio Escalante. “Dicho acuerdo está sujeto al cumplimiento de ciertas condiciones de cierre, autorización y trámites tradicionales para este tipo de operaciones. Se espera que la operación esté totalmente concluida antes del verano del 2026″, dijo Arriola. El proceso de venta del club empezó a petición de Salinas Pliego ante la Asamblea de Dueños de los otros 17 clubes de Primera División. Sin la aprobación mayoritaria de sus miembros no podían vender.
Para entender el puzle del fútbol mexicano hay que retroceder a 2018. En ese año, los dueños de los clubes de Primera División establecieron una serie de reglas para el ascenso de los equipos de la Segunda División, entre ellos un requisito de que las finanzas de los equipos fueran transparentes y sin adeudos, también que los estadios de cada uno de ellos tuviese un mínimo de 20.000 lugares. Eso sentó mal entre los empresarios de Segunda. Hubo veces en que el campeón de la categoría no podía ascender por no cumplir esos requisitos, como le ocurrió a Tapachula. El último equipo que ascendió fue el Atlético de San Luis Potosí, el equipo satélite del Atlético de Madrid, en 2019. Un club de Segunda, Bravos de Juárez, compró su lugar en Primera División ante la salida de los Lobos BUAP.
Fue en 2020, en plena pandemia, cuando los mismos dirigentes decidieron congelar el ascenso y descenso para proteger las inversiones de la Liga MX y así perjudicaron a los clubes que sufrían por escalar deportivamente. Hubo enojo, furia y protestas en los clubes, entre ellos, los del Atlante. La Segunda División siguió existiendo sin el mérito de ascender, lo único que ganaban era un trofeo sin alma. El Atlante lo ganó tres veces.
Grupo Salinas, en ese mismo 2020, cambió la identidad de su equipo de casa, Monarcas Morelia, para mudarlo de Michoacán a Mazatlán, en Sinaloa, porque quería maximizar su inversión en una plaza en la que nunca había habido fútbol de Primera División. Fue una apuesta en medio de una crisis económica. Los jugadores se mudaron y el equipo sufrió una metamorfosis. En los cinco años que lleva de historia, el club nunca ha sido campeón y menos clasificado a la fase final del torneo. Monarcas, en cambio, tenían un campeonato de Liga ganado en el 2000 y uno de Copa (2013).
El Atlante sí ha sido un equipo histórico con tres campeonatos de la Liga MX (1946-47, 1992-93 y 2007), dos Ligas de Campeones de la Concacaf (1983 y 2008-2009) y disputó el Mundial de Clubes en 2009 frente al Barcelona de Messi. El Atlante jugó en el mítico Estadio Azteca, después se mudó a Cancún en una apuesta agresiva para su historia. Regresó, en Segunda, a la capital al Estadio Ciudad de los Deportes y, en el último año, se trasladó a Morelos. A todos lados, a veces con más o menos euforia, le ha acompañado toda una legión de aficionados de abolengo que aún lanza cánticos desde la Tito Tepito, la principal porra del equipo.
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