La búsqueda de justicia para Karla Patricia Cortés, conductora de Uber asesinada en Ciudad de México
Su hija Brisa García persigue que la Fiscalía investigue la muerte de su madre como un feminicidio
Karla Patricia Cortés Cervantes fue asesinada en la tarde del 29 de diciembre en Ciudad de México. La conductora de Uber había salido a trabajar unas horas antes. En la madrugada le avisaron a su hija Brisa García de que habían encontrado su cuerpo en la alcaldía de Azcapotzalco, al norte de la capital. Desde entonces, la joven sigue buscando justicia para su madre, de 41 años, para que la Fiscalía investigue su muerte como feminicidio. En México, 10 mujeres son asesinadas cada día y el 95% de los casos queda impune.
“Pido a la Plataforma de Uber México que se haga responsable de los hechos ocurridos el pasado 29 de diciembre por el feminicidio de mi mamá Karla Patricia Cortés Cervantes. Ella era una conductora excelente que solamente hacía su trabajo”, así empezaba el mensaje de Brisa García para dar a conocer la muerte de su madre. En un hilo de X, la joven explicaba que Cortés había salido a mediodía para trabajar como conductora. Sobre las 20.00 horas recibió un disparo en la cabeza que acabó con su vida: “No fue un simple asalto”.
Unos videos difundidos después en redes sociales muestran la camioneta blanca de Karla Patricia estacionada en una calle de Azcapotzalco. Dentro del vehículo hay también otra persona. En un momento, se ve cómo el cuerpo sin vida de la conductora es tirado al asfalto, mientras el vehículo arranca. El coche fue encontrado más tarde. “La Fiscalía de Feminicidios de Ciudad de México intenta darle carpetazo al caso de mi mamá y clasificarlo solo como homicidio doloso”, ha acusado Brisa García. De momento, la dependencia capitalina no ha emitido información sobre el caso. Tampoco ha contestado a las preguntas de EL PAÍS.
Cortés Cervantes era madre de dos hijas, una de ellas menor de edad. Brisa García ha criticado también a la Fiscalía de no haber implementado ningún protocolo de protección a menores para su hermana de 15 años, de la que ahora se va a convertir en tutora legal. Además, García ha señalado que están siendo amedrentadas por la expareja de su madre. “Nos hemos quedado sin madre, nuestros derechos están siendo vulnerados, estamos en peligro”, ha dicho en un video de Instagram.
“Mi mamá era una mujer aguerrida, era una mujer trabajadora, mi mamá salió a trabajar y ya no regresó”, dice García, que ha pedido también a la aplicación Uber que se pronuncie y que implemente más medidas de seguridad para las mujeres que se dedican a trabajar en la aplicación: “Que nos puedan ofrecer seguros de vida a las víctimas a las que nos arrebataron nuestras familias”.
Uber ha afirmado este sábado que ha “recibido y respondido puntualmente” tres solicitudes de información por parte de la Fiscalía de Ciudad de México, entre el 30 de diciembre y el 2 de enero. “Nos reiteramos a disposición de las autoridades para continuar colaborando con las investigaciones del caso”, termina el comunicado de la empresa estadounidense. Mientras, Brisa García ha anunciado una marcha pacífica para este lunes hacia la Fiscalía de la capital para seguir presionando en la búsqueda de justicia.
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