Las claves de los cambios aprobados por el Senado sobre el ‘plan B’ de la reforma electoral: más dinero a los partidos y transferencia de votos

En Senado de la República ha aprobado durante la madrugada de este jueves una serie de cambios mínimos del “plan B” de la reforma electoral, impulsada por el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador y sacada adelante la semana pasada en la Cámara de Diputados. Entre las pequeñas modificaciones realizadas durante la madrugada, cabe destacar la transferencia de votos entre partidos de la misma coalición para asegurar su supervivencia y más dinero disponible para los partidos al permitir guardar recursos de años pasados, además mantener la columna vertebral de las medidas ya aprobadas por los diputados.

En el Senado, la reforma, con los pequeños cambios, consiguió la aprobación con una mayoría simple: 69 votos a favor y 53 en contra. Ahora, la minuta ha sido devuelta de nuevo a la Cámara de Diputados con las modificaciones en artículos específicos. Morena, el partido de López Obrador, buscará formalizar en San Lázaro la reforma que afecta al INE. Estos son algunos de los cambios más destacados que se produjeron durante la madrugada:

Traspaso de votos

La medida de transferir votos entre partidos de una coalición y la retención de recursos públicos por parte de las formaciones han vuelto a la minuta durante la madrugada, pese a que en la Cámara de Diputados la había retirado. De este modo, se mantiene la posibilidad de jugar con la aritmética de los votos entre partidos —lo que beneficiaría a partidos aliados de Morena, como el Partido del Trabajo o el Partido Verde— para conservar el registro. Por otra parte, se abre la posibilidad de que los partidos puedan guardar los recursos públicos que no ejercieron durante el año fiscal (hasta ahora, ese monto se debe reintegrar a la Tesorería de la Federación).

Menos poder al INE

Las modificaciones de algunos artículos de la reforma en el Senado han confirmado los cambios que acotan a la estructura del INE. De este modo, la medida impulsada por López Obrador quita facultades sancionadoras a la institución electoral, por lo que el INE ve reducida su capacidad para penar a funcionarios públicos que interfieren indebidamente en elecciones.

Recorte de gastos

Entre otras de las medidas que mantiene con respecto a lo aprobado en la Cámara de Diputados, se encuentra la restructuración de los salarios. De este modo, plantea que el sueldo de los consejeros del órgano electoral debe ser menor que el del presidente de la República. Elimina seguros de gastos médicos mayores e insta a que todos los trabajadores sean considerados en el régimen de confianza –una simplificación del pago del impuesto sin mediación terceros- e inscritos en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).

En la reforma, se insta al INE a liquidar fideicomisos que le permitían retener recursos públicos previstos para sus trabajadores. Las estructuras del INE y del Tribunal Electoral también se compactan. Desaparecen la secretaria ejecutiva y el servicio profesional de carrera. Se fusionan o eliminan diversas direcciones, áreas y unidades técnicas. Además, se reduce el número de distritos electorales en todo el país (de 300 a 260) y pasa a tener un carácter temporal. Morena cifra en 3.500 millones de pesos la reducción de los costos que representa este cambio.

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