Victoria Rodríguez Ceja defiende la autonomía del Banco de México y promete centrarse en el control de la inflación

El nombramiento de la subsecretaria de Egresos de Hacienda, Victoria Rodríguez Ceja, como gobernadora del Banco de México supuso la semana pasada un inesperado giro de guion del Gobierno que alimentó las dudas sobre los planes del presidente para el organismo. Andrés Manuel López Obrador postuló a la alta funcionaria, un perfil técnico sin proyección pública, tras reconsiderar la propuesta del exsecretario de esa dependencia, Arturo Herrera. El repentino cambio de criterio generó suspicacias en las filas opositoras y en los círculos económicos sobre la trayectoria de la candidata y su independencia del mandatario. Este miércoles Rodríguez Ceja ha comparecido en el Senado, que deberá ratificar su nuevo cargo, para exponer su plan. La economista ha tratado de tranquilizar a todo el mundo al defender “un respeto irrestricto a la autonomía” del banco central y al prometer que que se apegará al mandato único de la institución, que según la ley consiste en “procurar la estabilidad del poder adquisitivo” del peso.

Esta visión choca con la del propio López Obrador, quien en más de una ocasión ha manifestado que el Banco de México no debería limitarse a mantener a raya la inflación, sino también ocuparse de las políticas de crecimiento económico. El planteamiento de fondo es que el organismo pueda conceder préstamos al Gobierno federal. El primer discurso de Rodríguez Ceja en la Comisión de Hacienda y Crédito Público de la Cámara alta va en un sentido contrario. La futura gobernadora, la primera mujer en acceder a ese puesto, ha resaltado la centralidad del llamado mandato único, además de la independencia, sobre todo para apoyar a “los que menos tienen”, los más afectados por el incremento de los precios. Ambas premisas son, ha enfatizado, “elementos indispensables para mantener la certidumbre necesaria para el buen funcionamiento de la economía nacional”.

La funcionaria, que tiene garantizado el visto bueno del Senado gracias a la mayoría oficialista, asumirá el cargo en enero, en un momento especialmente preocupante por el aumento de la inflación, que en la primera quincena de noviembre superó el 7%. Rodríguez Ceja lo ha recordado en su intervención inicial. Esa señal de alarma se suma a los embates de la crisis financiera derivada de la pandemia de la covid-19, las restricciones a la movilidad y los problemas internacionales de las cadenas de suministro. La economista ha fijado un horizonte que deja incógnitas sobre la subida de la canasta básica el próximo año y que sitúa en el tercer trimestre de 2023 una normalización de la inflación hasta el 3%. Mientras tanto, ha afirmado la aspirante, las reservas internacionales del Banco de México, que ascienden a 199.000 millones de dólares, contribuirán a la estabilidad de la moneda nacional y darán “certidumbre al financiamiento externo.

Rodríguez Ceja ha afrontado los cuestionamientos de los representantes de la oposición, que en algunos casos han expresado reservas sobre sus requisitos para acceder al cargo. La subsecretaria de Hacienda ha dedicado buena parte de su exposición a repasar su currículum, del que hasta la semana pasada solo se conocía alguna pincelada en los ambientes económicos, además de su fama de técnica solvente pero sin experiencia en política monetaria. La próxima gobernadora, que ingresará en la Junta de Gobierno del banco central en sustitución de Alejandro Díaz de León, se ha referido a su vocación y ha recordado que decidió estudiar Economía por los efectos que sus variables tienen sobre las personas.

Tras formarse en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey y cursar una maestría en el Colegio de México, Rodríguez Ceja empezó a desempeñarse como directora de Deuda Pública del Distrito Federal. Después, fue directora de Finanzas del Sistema de Transporte Colectivo Metro. Volvió a la Secretaría de Finanzas de la Ciudad de México en 2009, durante la gestión del actual canciller, Marcelo Ebrard. También trabajó con su sucesor, Miguel Ángel Mancera, ya que en esa dependencia accedió al puesto de subsecretaria de Egresos, el mismo que ha ocupado hasta ahora en la Secretaría de Hacienda federal. En su última responsabilidad destacó que trabajó en el lograr el financiamiento de las vacunas y en las ayudas sociales del Gobierno.

El presidente afirmó la semana pasada que a su desempeño se debe la estabilidad financiera del país. No obstante, el nombramiento de Rodríguez Ceja ha estado rodeado de objeciones. Por las circunstancias en las que se produjo y por tener un perfil desconocido y sin galones en política monetaria, principalmente. Ella se ha defendido en el Senado destacando que su experiencia está “íntimamente ligada al conocimiento macroeconómico y a la práctica intensa en el terreno fiscal”.

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