Ocho muertos y 14 heridos durante un velorio en Cuernavaca

Casi 12 horas después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunciara durante su Informe de Gobierno que con su llegada al poder se habían terminado las masacres, un grupo de personas abrió fuego durante un velorio en Cuernavaca, capital del Estado de Morelos, y mató a ocho personas, entre ellos dos menores.

Según los primeros testimonios, dos camionetas llegaron la noche del martes a un domicilio de la colonia Antonio Baraona de Cuernavaca donde se realizaba el velorio de un joven motociclista que habría muerto de manera instantánea el lunes por la tarde al impactarse contra el muro de contención en el Paso Exprés. El grupo abrió fuego contra los familiares y amigos reunidos y causó la muerte de ocho personas. Además, dejó 14 heridos, que fueron trasladados a distintos hospitales. Entre los fallecidos hay dos jóvenes de 15 y 16 años.

Uno de los cadáveres fue localizado en el interior de un vehículo Tsuru, con placa de Morelos, fuera de un hospital en la colonia Delicias, aunque no se detalló si se trata de una de las personas que se encontraban en el velorio o era uno de los atacantes.

De acuerdo con las primeras investigaciones, los asesinos utilizaron armas de grueso calibre “que estarían relacionadas con otros delitos de alto impacto registrados de manera reciente, y en donde se cuenta con la participación de miembros de la delincuencia organizada”, señaló en un comunicado la fiscalía de Morelos. Medios locales señalaron que el miércoles que por la mañana hubo otra balacera en la misma colonia de Cuernavaca, aunque hasta el momento no hay reporte de heridos ni de personas muertas por el hecho.

La matanza coincide con varios narcobloqueos en Reynosa (Tamaulipas) publicados este miércoles en redes sociales, que alteraron a la población y complicaron el tráfico de la ciudad fronteriza. En algunos puntos de la ciudad se veían también llantas incendiadas, escribieron algunos usuarios en Twitter.

El senador independiente Emilio Álvarez Icaza señaló que “el crimen se suma a otras tantas masacres que han ocurrido en el Gobierno de Lopez Obrador”. “Las cifras alegres de AMLO en seguridad son una burla para víctimas y familiares en Veracruz, Sonora, Guerrero, Tamaulipas y CDMX”, tuiteó el senador.

Desde la llegada de López Obrador al poder, en diciembre de 2018, un promedio de 99 personas mueren asesinadas en México. En los primeros 18 meses de su Gobierno, se registraron 53.628 asesinatos, de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), lo que supone 12.615 fallecidos más que en los dos primeros años del sexenio de Enrique Peña Nieto, cuando se contabilizaron 41.013.

Las cifras prevén que 2020 —a pesar de la pandemia del coronavirus que provocó encierros masivos— se convierta en el año más violento jamás registrado, debido a que los casos notificados superan ampliamente los primeros meses del año pasado (17.653). Hasta el momento, 2019 había sido el año más violento de la historia reciente del país, pero el ritmo del actual hace prever que este será peor en lo que a seguridad y violencia se refiere, un incremento que el mandatario atribuye al crimen organizado.