La división en la política brasileña llega hasta el palco olímpico
Brasil llega a los Juegos marcada por una grave polarización. Temer y Rousseff simbolizan esta división


El inicio de los Juegos Olímpicos atrae sobre Brasil la atención global. La sociedad brasileña llega a la cita marcada por una grave polarización. Dos líderes en entredicho simbolizan esta división. La presidenta Dilma Rousseff, apartada del poder provisionalmente desde el 12 de mayo, verá la ceremonia por televisión. Mientras, el Gobierno teme un abucheo al mandatario interino. EL PAÍS centra su mirada en la situación de los líderes que protagonizan la ruptura social.

El cerco se estrecha sobre Dilma Rousseff
La presidenta, apartada desde el pasado mes de mayo, no acudirá a la cita olímpica.

Temer busca capear su profunda impopularidad
El presidente interino teme un gran abucheo en la inauguración oficial de los Juegos de Río.
Sobre la firma

Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.
Archivado En
- Partido de los Trabajadores
- Caso Petrobras
- Dilma Rousseff
- Escándalos políticos
- Presidente Brasil
- Policia Federal
- Petrobras
- Sobornos
- Financiación ilegal
- Blanqueo dinero
- Dinero negro
- Financiación partidos
- Corrupción política
- Juegos Olímpicos
- Delitos fiscales
- Policía
- Corrupción
- Partidos políticos
- Fuerzas seguridad
- Competiciones
- Deportes
- Empresas
- Delitos
- Economía
- Política