El CNIO (y la grieta que lo atraviesa): cómo una crisis interna amenaza a un centro que es referencia científica
El Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), el principal organismo público dedicado al estudio del cáncer en España, atraviesa una crisis interna que se prolonga desde hace más de un año.
¿Qué ha pasado? La tensión ha estallado de nuevo tras la decisión del patronato (su máximo órgano de gobierno) de suprimir tres altos cargos vinculados a la etapa anterior, marcada por presuntas irregularidades en la contratación.
¿Por qué ahora? Porque el nuevo gerente, José Manuel Bernabé, quiere estabilizar el CNIO y aclarar si hubo contratos amañados.
- La reestructuración busca eliminar duplicidades y redirigir recursos.
- Pero llega justo cuando se han hecho públicos los detalles de una denuncia por presuntas irregularidades en la contratación.
¿Qué dice la denuncia? Señala directamente al anterior gerente, Juan Arroyo, por su presunta implicación en adjudicar contratos a empresas amigas.
- Las otras dos personas cesadas eran parte de su círculo cercano.
- La Fiscalía ha admitido la denuncia, aunque todavía no ha abierto diligencias ni contactado con los implicados.
Una crisis que viene de lejos. Mucho antes de esta polémica ya existía un choque abierto entre la directora científica, María Blasco, y el gerente Juan Arroyo.
- Las tensiones derivaron en deterioro de instalaciones, averías en equipamientos clave y fallos en el animalario, que alberga decenas de miles de ratones.
¿Y esto cómo nos afecta? En el deterioro científico y la pérdida de talento. Un informe interno elevado al Ministerio de Ciencia señalaba una caída en la producción de ciencia de alta calidad y en la capacidad de atraer investigadores punteros.
©Foto: Laura M. Lombardía (CNIO)