La “comida de blancos” se convierte en objeto de burla en China
Redes sociales como Weibo y Xiaohongshu se llenan de publicaciones con mofas hacia la supuesta insipidez de los menús occidentales
Un trozo de pan de molde con mantequilla de cacahuete, zanahorias con humus o galletas con queso y jamón son comidas que un occidental podría llevar en su táper para comer en el trabajo un día cualquiera. Esto no es nada nuevo, pero en las últimas semanas se ha vuelto un tema viral en China. Las redes sociales como Weibo o Xiaohongshu (equivalentes chinos a Twitter e Instagram...
Un trozo de pan de molde con mantequilla de cacahuete, zanahorias con humus o galletas con queso y jamón son comidas que un occidental podría llevar en su táper para comer en el trabajo un día cualquiera. Esto no es nada nuevo, pero en las últimas semanas se ha vuelto un tema viral en China. Las redes sociales como Weibo o Xiaohongshu (equivalentes chinos a Twitter e Instagram, respectivamente) están ahora llenas de publicaciones sobre lo que han bautizado los usuarios como “comida de gente blanca”. Algunos se burlan de ella por ser insípida y sin sabor —se pueden leer comparaciones entre ingerir estas comidas y sufrir una tortura— y otros se muestran fascinados al ver el poco esfuerzo que requiere prepararla, ya que en China la costumbre es hacer comidas elaboradas y con muchos tipos de ingredientes.
La tendencia consiste simplemente en preparar “comida de gente blanca” y compartir la experiencia en redes sociales con fotos y vídeos de estos exóticos platillos. La moda comenzó después de que se hiciera viral un vídeo de una mujer en Suiza preparando su comida en un tren, que consistía simplemente en una bolsa de lechuga, trocitos de jamón y un sobre de mostaza. En la cultura online de China esto fue el portal a un nuevo mundo gastronómico que ha causado fascinación. Desde entonces, no paran de hacerse publicaciones de “platillos” como avena con yogur o verduras en trocitos, enfatizando la falta de sabor y disfrute que hay en comer de esta forma tan austera.
El tiktoker chino Marcelo Wang explica en un vídeo este fenómeno a sus seguidores occidentales: “Los chinos están muy acostumbrados a utilizar muchos ingredientes diferentes en su comida”. El contraste con las imágenes de la “comida blanca” es síntoma de una enorme brecha cultural que funcionó como caldo de cultivo para el contenido viral. La comida casera china suele requerir mucho trabajo, tiempo y dedicación. Un trozo de pan con jamón no requiere nada de esto y, según Wang, por eso los usuarios chinos se unen a la tendencia con tanto entusiasmo.
Julio Zhang, chef del restaurante madrileño Soy Kitchen, explica que para los chinos cada tiempo de comida es un momento sumamente importante. En los días de trabajo, indica Zhang por teléfono, tener una buena comida al mediodía es fundamental porque en China las jornadas laborales pueden ser extensas y agotadoras.
“En China les gusta siempre que la comida sea más fuerte y más sabrosa”, apunta el chef de Soy Kitchen, y agrega que recientemente el gusto por la comida picante ha venido creciendo. Por eso se ha puesto de moda la gastronomía de Sichuan, famosa por sus sabores intensos.
Zhang, sin embargo, matiza que el concepto viral de “comida de gente blanca” no representa la idea que la mayoría de los chinos tienen verdaderamente de la comida occidental y que muchos viajan a Europa por su interés en las distintas gastronomías. La cocina de España, dice Zhang, tiene una buena reputación en su país natal, China. Este chef, que estudió gastronomía española en Pamplona —en su restaurante combina técnicas e ingredientes de diferentes orígenes—, considera que la comida en España tiene una variedad tan grande que le recuerda a la de China. Por eso no cree que se pueda incluir lo español dentro de esa categoría de “comida de blancos”: “Para mí, incluso un pincho de tortilla es complejo y tiene muchas cosas ricas”.