Elizabeth Taylor se casó en siete ocasiones, aunque el matrimonio más fugaz de la actriz fue con su primer marido. En 1650, cuando tenía 18 años, se casó con Conrad Hilton Jr en una boda celebrada por todo lo alto y organizada por los estudios MGM que sirvió para promocionar la siguiente película de la estrella de Hollywood.
No había pasado ni un año desde su enlace —en concreto, ocho meses— y la pareja se divorciaba. La estrella de la industria del cine no solo descubrió que tenían pocas cosas en común, sino que era maltratador y alcohólico.