Moda y música siempre han ido de la mano, o si no, que se lo digan a Hedi Slimane. Basta recordar el concierto que el diseñador montó el año pasado en el Hollywood Palladium para presentar su última colección al frente de Saint Laurent. Slimane siempre quiso vestir rockeros y ahora, parece que los nuevos rockeros quieren tomar la pasarela. O al menos, los vástagos de esta dinastía. Sin ir más lejos, en la maison de Chanel los apellidos conocidos se acumulan. A otras herederas del rock que ya son imagen de marca como Georgia May Jagger y Frances Bean Cobain (esta última, de Marc Jacobs) hay que sumarle una última incorporación, Paris Jackson, la hija del Rey del Pop. Karl Lagerfeld ha encontrado en Neverland a su última musa que, con dieciocho recién cumplidos, protagoniza la última campaña de la firma francesa.Merecido o no, este no es el único caso de herederos convertidos en modelos. Lennon Gallagher acaba de debutar con la firma británica Topman y otra hija del excantante de Oasis, Molly Moorish, ha sido imagen de Calvin Klein. El cambio lleva anunciándolo durante años Dolce & Gabbana, y se puede ver en su última campaña Meet the millennials, protagonizada por Dylan Jagger o Tomas Lee. Los jóvenes con pedigrí rock conquistan la pasarela.Ha sido el último en sumarse a la lista de herederos. Con apenas 17 años, Lennon no solo acaba de debutar en la pasarela London Fashion Week con Topman, sino que también ha fichado por la agencia Models 1 o, lo que es más increible, ha conseguido que su padre se pusiera tierno y mostrara su orgullo en Twitter.Creció en festivales como el de Coachella y su estilo boho, de los de verdad, ha sido muchas veces reseñado en revistas de tendencias. Cazadoras viejas de su madre, vestidos de lentejuelas o zapatos de plástico componen su armario. Aunque su contacto con la moda es más bien casual, Diva tocó en grupos como Black Black, que a menudo salía reseñado en Urban Outfitters, e incluso protagonizó la campaña del diseñador Peter Jensen con otros hijísimos como Tennessee Thomas.Con dieciocho años recién cumplidos, acaba de debutar con Chanel, pasando a formar parte del séquito de millennials de Karl Lagerfeld. Pero ser la digna heredera del rey del pop no fue sencillo. Acoso, problemas con la bebida e intento de suicidio componen su historial adolescente.Se empeñó en estudiar bioquímica para huir de la sombra de su padre, pero lleva en los genes lo de ser una rockstar: es el líder de la banda Turbogeist, actuó en Vinyl por elección de Scorsese, protagonizó campañas de Jimmy Choo o Moncler e, incluso, se casó en secreto.Primero vino la música (sus abuelos le daban un dólar por cada canción que tocara) y más tarde llegó la actuación. Pero en Hollywood el apellido no siempre ayuda, y menos cuando tienes principios. Imagen de YSL, no está dispuesta a aceptar cualquier tipo de papel esterotipado.Es fan de Stone Roses, Blur y Patti Smith, pero su interés por la música no ha ido más lejos. Eso sí, ese estilo que parece tomado de un icono de los noventa ya ha llamado la atención de marcas como Calvin Klein.Con esta cara aniñada y ese flequillo tan propio de un teen californiano, conquistó al mismísimo Hedi Slimane, que a la hora de descubrir a herederos del rock nunca falla. Debutó con Saint Laurent, pero ya los hemos visto en otros desfiles, como el de Dolce & Gabbana.
