Constance Mabusela, la abuela de Mzwandile, relata: "Antes de comenzar con el tratamiento antirretroviral, Mzwandile tenía hemorragias nasales durante toda la noche. Ahora está mejor, pero lamentablemente los medicamentos no es lo único que debemos tener en cuenta a la hora de que mi nieto esté bien. En este momento tiene que prestar una especial atención a su alimentación y me preocupa mucho las dificultades que tenemos para acceder a los alimentos y a las medicinas".JCT - MSF"Para mí, el virus es algo similar a un monstruo. Tiene muchos ojos, come cuernos y hace un sonido como 'Brouaaaagh'. Yo creo que está en mi corazón". "Soy positivo y creo que se va a encontrar una cura para la enfermedad. A veces es muy duro tomar los medicamentos, pero no tengo más remedio que hacerlo", cuenta Mzwandile. Su único deseo: "Vivir más".JCT - MSFFocus Dube, un chico de 17 años, cuenta que para él el momento más difícil fue cuando le diagnosticaron la enfermedad. "Estaba tan enfermo cuando me lo dijeron que no podía creérmelo". Su madre murió de Sida y tuvo cáncer en su pierna derecha. Focus tiene miedo de que le diagnostiquen cáncer a él también.JCT - MSFAlywin Ndlovu es el tío de Focus Dube. Ha asumido el cuidado de los tres hijos de su hermana fallecida y tiene otros tres niños propios. Afortunadamente, Focus es el único que está infectado. Alywin cuenta que el desafío más grande al que tiene que enfrentarse cada día es al de conseguir alimentos y está muy preocupado porque Focus pueda llegar a olvidarse de tomar su pastilla en los momentos en los que tiene que dejarle solo.JCT - MSFFocus trata de ser fuerte y mostrar su valentía, pero la realidad a la que tiene que enfrentarse cada día es muy dura. Prueba de ello es que tan sólo unos segundos más tarde de decirnos que no tiene miedo a nada, vuelve a caer en el desánimo: "No se lo he dicho a mis amigos porque si lo supieran se irían de mi lado y yo me quedaría solo".JCT - MSFPara Fortunate Dube, de 16 años, "el virus se parece a un pequeño insecto", aunque en su caso cree que son muchos y no sólo uno. Sus padres murieron a causa del Sida y ella estuvo con ellos durante todo el proceso de la enfermedad. "Mi madre vomitaba y yo la llevaba al baño. Yo estaba con ella cuando se murió". "No tengo miedo a nada, aunque mis peores momentos fueron con las muertes de mis padres".JCT - MSF
