7 fotosEl Ejido, ocho años despuésEl Ejido, ocho años después 16 oct 2008 - 00:00CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceAsí lo piensan muchos de lo que llegan desde el otro lado del Estrecho. En la imagen, un cortijo de inmigrantes de Malí, cada uno paga 50 euros. No tienen papeles.ALFREDO CÁLIZLos marroquíes y subsaharianos que pueblan los invernaderos relatan su historia sin dramatismo, sin lágrimas. Ninguno quiere volver a su país. Sobreviven como pueden, algunos en pequeñas chabolas.ALFREDO CÁLIZAlmería estaba en los años setenta en la cola de las provincias españolas por renta. En dos décadas los agricultores han pasado del asno al Mercedes. 'Plástico hasta la cocina, no hay sitio para más', dice el viejo agricultor Andrés Fornieles (en la imagen).ALFREDO CÁLIZHassan y Mohamed, de Kenitra (Marruecos), en la 'ducha' que comparten con otros compañeros en un cortijo en ruinas. Deben andar ocho kilómetros parar recoger el agua.ALFREDO CÁLIZLos vecinos siguen desconfiando de los magrebíes. Hablan de "inseguridad ciudadana" y están dispuestos a formar patrullas para vigilar los invernaderos y evitar los "crecientes hurtos". En la imagen el impecable invernadero de José Antonio Castillo.ALFREDO CÁLIZSubsaharianos aguardan a ser contratados en un 'paradero' a la salida de El Ejido. Estos puntos de reunión están desperdigados por toda la comarca. Comienzan a funcionar de madrugada y no paran durante todo el día. Por ocho horas se pagan no más de 35 euros.ALFREDO CÁLIZLa producción de los invernaderos de El Ejido no llega sólo a los mercados españoles, también sale al extranjero. En la imagen, la cooperativa Coprohnijar, que inunda Europa de hortalizas.ALFREDO CÁLIZ