5 fotosLa Vanguardia y la Gran GuerraLa Vanguardia y la Gran Guerra 06 oct 2008 - 00:00CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceSe trata de un recorrido completamente inédito organizado a través de trece capítulos que se distribuyen entre las dos sedes de la exposición: las salas del Museo Thyssen-Bornemisza y de la Fundación Caja Madrid. Entre las obras expuestas -222 en total, cedidas para la ocasión por hasta ochenta prestadores de dieciséis países diferentes- destacan algunos préstamos y conjuntos excepcionales, tanto por la importancia y calidad de las piezas como por tratarse en algunos casos de trabajos prácticamente inéditos, poco conocidos o apenas expuestos al público. En la imagen, la obra de Natalia Sergeevna Goncharova La guerra o Imágenes místicas de la guerra:Ángeles y aeroplanos, 1914 (Voïna: mistitcheskie obrazy voïny), Litografía sobre papel 30,5 x 22,5 cm The State Russian Museum, San PetersburgoMUSEO THYSSEN-BORNEMISZA / FUNDACIÓN CAJAMADRIDLa exposición arranca con algunas obras fundamentales de Franz Marc, Otto Dix y de Egon Schiele, realizadas en los años inmediatamente anteriores a la Gran Guerra, que ofrecen una visión fatalista del mundo que representan y están marcadas por el desconsuelo y por alusiones a la muerte y la amenaza. Wassily Kandinsky Lírico, 1911 (Lyrisches (Lyrique) ) Óleo sobre lienzo 94 x 130 cm Museum Boijmans-Van Beuningen, RotterdamMUSEO THYSSEN-BORNEMISZA / FUNDACIÓN CAJAMADRIDLa función de la pintura como medio de anticipación o de revelación de una realidad más elevada, y como promesa de liberación de valores espirituales, determina una buena parte del arte nuevo en torno a 1913. Bajo el título de este capítulo se agrupan una serie de pinturas y esculturas -de Kupka, Marc, Souza Cardoso, Epstein, Goncharova o Brancusi- que responden explícitamente a la capacidad del arte de anticipar acontecimientos lejanos. En la imagen, obra de Constantin Brancusi. Maiastra, 1912. Colección Peggy Guggenheim, Venecia (Fundación Solomon R. Guggenheim, Nueva York)MUSEO THYSSEN-BORNEMISZA / FUNDACIÓN CAJAMADRIDLa representación de energías en tensión o en desplazamiento, desprovista de referentes figurativos, fue motivo frecuente de composiciones abstractas en torno a 1914 y, en ocasiones, éstas aluden analógicamente a la realidad de la guerra. En la imagen, Giacomo Balla. Manifestación XX Septiembre, 1915. Collezioni d'arte e di storia della Fondazione Cassa di Risparmio in Bologna, Bolonia.MUSEO THYSSEN-BORNEMISZA / FUNDACIÓN CAJAMADRIDDe entre los numerosos artistas que fueron movilizados al estallar la guerra o que se alistaron voluntariamente, hubo algunos -particularmente del entorno expresionista- que escenificaron en sus cuadros su condición de soldados. El autorretrato del artista como soldado constituye un género especial en la pintura de vanguardia durante la Guerra Mundial. La muestra ¡1914! La Vanguardia y la Gran Guerra estará abierta hasta el 11 de enero de 2009. En la imagen: Max Beckmann, Autorretrato como enfermero, 1915 (Selbstbildnis als Krankenpfleger) Óleo sobre lienzo 55'5 x 38'5 Kunst - und useumsverein, Von der Heydt- Museum, WuppertalMUSEO THYSSEN-BORNEMISZA / FUNDACIÓN CAJAMADRID