Los príncipes de Asturias han acelerado la sobremesa en el restaurante Arzak para poder dar un paseo por la playa de La Concha, en San Sebastián. El buen tiempo ha acompañado a Don Felipe y Doña Letizia, que han vuelto a coger después el coche para llegar hasta Hernani.EFEQué mejor sitio para reponer fuerzas que el restaurante que Arzak tiene en San Sebastián. Allí han llegado los príncipes de Asturias a mediodía. Una vez dentro del local, cientos de personas han reclamado desde la calle la presencia de la pareja, que se ha asomado a una de las ventanas para saludar.JAVIER HERNÁNDEZLa llegada a Olite de los príncipes de Asturias apenas ha sido anunciada con media hora de antelación, pero a los niños de la localidad les ha dado tiempo a salir de la escuela y acercarse hasta el heredero de la corona, que ha firmado autógrafos junto a Letizia Ortiz. Don Felipe volverá a Navarra en menos de un mes para entregar el Premio Príncipe de Viana de la Cultura.EFEEn el camino entre Sos del Rey Católico y San Sebastián, los príncipes de Asturias pararon en la localidad navarra de Olite para visitar el castillo que ordenó construir Carlos III El Noble, rey de Navarra, a finales del siglo XIV. Este rey creó para su nieto el título de Príncipe de Viana, que ahora ostenta Don Felipe.EFEAcompañados por numerosos vecinos, la pareja ha recorrido las calles de Sos del Rey Católico (Zaragoza) y ha visitado algunos de los lugares imprescindibles de la localidad fortificada, como el Palacio de Sada, en el que nació Fernando el Católico, o la iglesia de San Esteban, donde fue bautizado. Para este paseo, Doña Letizia se ha calzado unos zapatos planos, mucho más cómodos que los tacones de vértigo de sus comperencias públicas.EFELos príncipes de Asturias han continuado "disfrutando de España", según palabras de Doña Letizia, en su tercer día de luna de miel, en el que han visitado por la mañana la localidad de Sos del Rey Católico (Zaragoza), una joya de la arquitectura medieval donde nació el rey Fernando el Católico en 1452. En la foto, los recién casados saludan a los niños que les han vitoreado durante su paseo por las calles de la localidad zaragozana.EFELa visita al templo fue breve. La pareja oró ante la Virgen -cumpliendo una tradición de la familia real-, y luego subió al camarín para besar la imagen, que lucía un manto bordado por la reina María de las Mercedes. El deán, Antero Hombria, explicó que les ofreció firmar en el libro de oro. La avalancha de gente fue tan impresionante dentro del templo que el libro tuvo que ser firmado fuera de la sacristía porque no se podía pasar a ella.EFELa plaza del Pilar comenzó a llenarse de gente poco después de las tres de la tarde de ayer, cuando empezó a correr la noticia de la visita de los Príncipes. Más de 5.000 personas se agolparon, aplaudieron e intentaron saludar a los recién casados cuando llegaron a la basílica del Pilar, después de visitar Cuenca, donde pasaron la noche del domingo, y la localidad turolense de Albarracín.EFELos novios pasearon por las hermosas calles de Albarracín, que muestran la grandeza de las casonas y su arquitectura popular irrepetible. Se asomaron al mirador, y acompañados de Antonio Jiménez, director de la Fundación Santa María, visitaron la catedral y el palacio episcopal, que el Príncipe ya conocía de cuando realizó su primer viaje oficial a la comunidad.EFEEra poco después de la una de la tarde cuando los príncipes de Asturias llegaban a la localidad turolense de Albarracín (1.000 habitantes), un enclave monumental, propuesta para ser declarada Patrimonio de la Humanidad, procedentes de Cuenca. Cuando la noticia de que don Felipe y doña Letizia habían elegido esa localidad como segunda parada en su luna de miel, la gente se echó a la calle.EFEEl lunes por la mañana, don Felipe y doña Letizia realizaron una visita a la ciudad. El Príncipe vestía pantalones vaqueros y jersey azul y la Princesa una gabardina blanca y también pantalones tejanos.EFELa luna de miel la iniciaron los Príncipes el domingo en Cuenca, adonde viajaron desde Madrid en su coche particular, y el domingo por la noche cenaron en un conocido restaurante de las Casas Colgadas, para pasear luego por las calles y retirarse más tarde a dormir al parador de San Pablo.EFE
