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La receta para generar conexiones

Las empresas-plataforma crean alianzas con otras compañías y organizaciones, facilitando así al cliente el acceso a productos y servicios

Leroy Merlín 1

La palabra “colaborar” proviene del latín. Deriva del verbo “collaborāre”, que significa ‘trabajar juntos’. Un concepto que, en estos tiempos de pandemia, resulta más necesario que nunca. Una de las formas en las hoy que se ejerce esa colaboración es a través de las empresas-plataforma. Se trata de empresas que generan conexiones.

Para ello, la empresa identifica proyectos que tienen un valor añadido, los hace converger en una plataforma de colaboración y los pone al servicio de la comunidad. Hace de intermediaria, conectando a sus clientes con compañías o particulares que les puedan echar una mano con productos y servicios que la propia empresa no suministra.

Después de la crisis financiera de 2008 hubo un boom de empresas-plataforma. Y ahora, con la crisis que ha traído el coronavirus, se espera otra explosión. Al fin y al cabo, y como bien recoge el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 17, en momentos de dificultades la unión y la cooperación ganan enteros.

“Las empresas-plataforma son beneficiosas para todos los actores”, subraya el economista Carlos Gil Madrigal. “Para los usuarios resultan muy atractivas: ponen a su disposición servicios y artículos, avalados todos ellos por la compañía que promueve la plataforma, y a los que puedan acceder fácilmente. Y a las empresas y a los particulares que se integran en la plataforma les permite ampliar la capacidad de llegar con sus productos a más personas, alcanzar nuevos canales de venta e interaccionar con nuevos clientes”.

Tanto el Fondo Monetario Internacional (FMI) como el Banco Mundial llevan ya años advirtiendo que los países e industrias que más rápidamente adoptan nuevas tecnologías de empresas-plataforma logran un crecimiento más rápido y sostenible.

Las empresas-plataforma son beneficiosas para todos los actores: usuarios, empresas y particulares
Carlos Gil Madrigal, economista

Hay numerosos ejemplos de plataforma. Ahí está por ejemplo Mr. Jeff: es una aplicación española que conecta a propietarios de lavanderías con personas que necesitan lavar su ropa y no quieren perder el tiempo en hacer ellas mismas la colada. A través de esa empresa-plataforma, las lavanderías y tintorerías entran en contacto con clientes y, los usuarios encuentran quién les lave la ropa, decidiendo además el horario en el que desean que pasen a recoger las prendas y el horario de entrega de las mismas ya limpias.

También Leroy Merlin ha apostado por ser una empresa-plataforma y establecer conexiones con otras empresas y profesionales. Al fin y al cabo, esta compañía especializada en el acondicionamiento del hogar cree firmemente en la importancia de la colaboración, con una gestión de las personas que impulsa la iniciativa y el emprendimiento, claves que Leroy Merlin ya comparte con un modelo de plataforma. Lo demuestra, por ejemplo, que el 96% de sus trabajadores sean accionistas de ADEO, grupo al que la compañía pertenece. Y, ahora, ha dado el salto al mundo de las empresas-plataforma.

Mejorar entornos y crear conexiones

“Hemos pasado de ser una tienda donde se facilitaba el acceso a una gama muy amplia de productos a convertirnos en algo que va mucho más allá”, subraya Rodrigo de Salas, director de Comunicación, Identidad Corporativa y Negocio Responsable de Leroy Merlin España. “Nuestro rol ya no es solamente el de vendedores de soluciones o prestadores de un servicio de atención al cliente en nuestras tiendas o canales digitales. Nuestro propósito es mejorar los entornos, y para ello también creamos conexiones que generan valor a todos los niveles”.

Hogami, sin ir más lejos, es una plataforma de servicios de acondicionamiento del hogar que pone en contacto a usuarios y profesionales (no importa si son o no clientes de la compañía) y donde Leroy Merlin actúa como mera intermediaria, seleccionando y avalando (eso sí) a las empresas que prestan sus servicios. “Nos dimos cuenta que era complicado encontrar profesionales de confianza para los servicios del hogar. Por ello, decidimos crear un entorno donde estos expertos pudieran ofertar sus servicios” explica Luis Herrero, líder de la Plataforma de Servicios.

LEROY

Otro de los beneficios de la colaboración es que brinda oportunidades a todos. La Fundación Comercio para el Desarrollo (COPADE) desarrolla junto a Leroy Merlin el proyecto “Madera Justa” que busca ayudar a las comunidades forestales de la Reserva de la Biosfera Maya en Guatemala, creando un modelo basado en la explotación sostenible de sus bosques y los principios del Comercio Justo. Esto se materializa en una línea de productos de jardín de venta en Leroy Merlin. Además, y en línea con estas alianzas, el año pasado la compañía desarrolló en colaboración con sus principales grupos de interés (COPADE, FSC, Madera Justa, NEPCon, PEFC, WWF, distintos certificadores, entidades sociales y proveedores de la compañía) una política de Compras Responsables de Productos de Madera.

“Una empresa-plataforma identifica proyectos, servicios y productos, los hace converger en una plataforma de colaboración y los pone al servicio de los usuarios”, sentencia el economista Carlos Gil.

Se trata siempre de “collaborāre”, de trabajar juntos.

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