Contador y el engorde ilegal

La defensa de Alberto Contador modificó ayer la lista de testigos y expertos designados para declarar la próxima semana en Lausana ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) en la vista por su positivo por clembuterol en un control antidopaje del Tour de 2010. De la relación de 13 personas avanzada hace unas semanas se han borrado dos nombres: el de su compañero de equipo Jesús Hernández y el de un oficial de la Guardia Civil.

A su vez, la Federación Española de Ciclismo, que debe defender ante el TAS la decisión de su Comité de Competición de no sancionar a Contador, perfila independientemente sus argumentos, que pasan por demostrar que la tesis de la carne contaminada, fruto de la actividad de engorde ilegal por parte de un ganadero, es la única que puede explicar los 50 picogramos de clembuterol en la orina del corredor.

La vista se celebrará la próxima semana, pero la decisión tardará al menos un mes

Aun admitiendo que en España ningún ganadero utilice clembuterol, la federación, basándose en un informe del Tribunal Europeo de Cuentas, de noviembre de 2010, sostiene que es posible que una partida de carne importada sí que estuviera contaminada. Así, el informe del organismo europeo indica que, mientras el plan de control de la importación preveía que se analizara un 5% de las partidas recibidas, en España solo se envió al laboratorio en 2008 un 0,4% de la carne roja que llegó de fuera de las fronteras europeas. Además, se añade, "los planes de vigilancia de 2008 no permitieron detectar en la carne ciertas categorías de residuos hormonales (anabolizantes) o contaminantes medioambientales (dioxinas y metales pesados)".

Hace unos meses, los abogados de Contador solicitaron al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), de la Guardia Civil, que uno de sus oficiales especialista en la lucha contra el fraude ganadero testificara ante el TAS que en España sí que se producen casos de engorde ilegal y las inspecciones que llevan a cabo.

Según fuentes del Seprona, a Contador le informaron de que desde 2005 se habían producido 24 intervenciones en explotaciones ganaderas contra el engorde ilegal con piensos y sustancias prohibidas, pero le precisaron que en ninguna de ellas se había encontrado clembuterol.

Contador también hará ver que sus detectives fueron incapaces de hallar la línea de trazabilidad de la pieza de solomillo que su amigo José Luis López Cerrón compró en una carnicería de Irún camino de Pau, donde se hizo a la plancha para el equipo Astana.

La petición de un testigo por parte del ciclista causó cierto desasosiego en la Guardia Civil, dudas que su renuncia posterior han aliviado. Un oficial ya testificó ante el TAS por el caso Valverde, pero lo hizo a petición del Consejo Superior de Deportes. En este asunto se trataba de que una institución del Estado se pusiera al servicio de una persona privada en una vista ante un ente jurídico privado, como es el TAS. Tampoco habrían entendido testificar en su contra, aunque en ningún momento ni la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) ni la Unión Ciclista Internacional (UCI), los dos organismos que han recurrido contra Contador y la federación, solicitaron su presencia en las salas de Lausana en que tendrá lugar la vista desde el mediodía del próximo lunes, día 21, hasta las 12.30 aproximadamente del jueves 24. La decisión de la defensa de Contador de renunciar a su testigo ha evitado la negativa. Contador, que regresará próximamente de su luna de miel en el Caribe y Roma, acudirá a testificar posiblemente el martes 22.

Estas son las fechas definitivas de la vista de un caso que se arrastra desde julio de 2010 y que se ha aplazado ya en dos ocasiones, desde junio hasta agosto y desde entonces hasta noviembre. La decisión de los tres árbitros del TAS (la formación la preside el israelí Efraín Barak y la componen también Ullrich Haas por parte de Contador y Quentin Byrne-Sutton por parte de los recurrentes) no se conocerá, sin embargo, hasta varias semanas después, posiblemente de mes y medio a dos, según anunció ayer en una nota de prensa el propio TAS. Este es, de todas maneras, el plazo habitual que los árbitros suelen tomarse no solo para llegar a una decisión, que puede ser unánime o tomada por mayoría de dos a uno y que pueden alcanzar rápidamente, sino para redactar el laudo con los fundamentos jurídicos en que se ha basado su determinación.

Mientras la UCI y la AMA piden que se le imponga una sanción de dos años de suspensión, Contador solicita su exoneración total. También el TAS podría decidir una pena intermedia, de seis meses o un año.