"Hemos tenido tantos problemas como el que más"

Antonio Banderas está estos días recorriendo medio mundo con la promoción de La piel que habito, su última película, en la que se ha reencontrado con el director Pedro Almodóvar. El actor español ofrece por ello muchas entrevistas en las que no rehúye preguntas sobre su vida privada, en la que Melanie Griffith ocupa un lugar desde hace 20 años."Tuvimos problemas, ella tenía problemas que debía resolver. Lo hizo y está trabajando de nuevo en ello. Así que estoy muy feliz. Ahora se acepta por completo. Tiene 54 años y no va a volver a ser la chica sexi nunca más, pero a ella también le gusta eso", confiesa Banderas. "Tuvo adicción a las pastillas. Pero de eso hace ya tres años", añade.

"Afectó a nuestra vida personal, pero profesionalmente hizo que ella abandonara su carrera. Porque en Hollywood eso es un anatema", señala el actor. En 15 años de matrimonio, Antonio Banderas y Melanie Griffith admiten haber "tenido tantos problemas como el que más". "Nunca nos hemos escondido. Hemos hablado claro acerca de las adicciones de Melanie", declara Banderas en la edición de noviembre de AARP The Magazine.

La franqueza con la que el actor aborda el problema de su esposa se extiende a sus hijos, asegura. La pareja tiene en común a Stella, que cumple 15 años esta semana. Además, Griffith es madre de dos jóvenes de relaciones anteriores: Alexander, de 26 años, y Dakota, de 21.

"El ocultar es peor, porque los niños son tan inteligentes", dice Banderas. "Si no se habla abiertamente de los problemas es malo. Afecta al matrimonio y a los hijos".

Banderas, de 51 años, y Griffith, de 54, tienen diferentes recuerdos de la última recaída de la actriz. Según él, toda la familia participó en la recuperación: "Hicimos todas las terapias juntos".

La actriz no lo ve así. "Antonio fue un apoyo en la medida en que puede serlo, pero si no eres un alcohólico o un drogadicto, y te das cuenta de que tu mujer está mal, es difícil de abordar. Fue muy extraño para él. La adicción es mía, no suya".

La actriz habla de cómo llegó la recaída: "Empecé con pastillas para el dolor cuando me lastimé la rodilla esquiando y seguí tomándolas. Los niños lo sabían y Dakota y Stella le pidieron a Antonio, que se encontraba en Londres, que volviera. Me fui a rehabilitación durante tres meses".

La pareja asegura que su relación permanece intacta pese a estos problemas. Se conocieron en 1995 durante el rodaje de Two much, cuando ambos estaban casados con otras personas.

"Yo vi este alma dulce, vulnerable, divertida, muy inteligente y generosa", recuerda Banderas. "La vi con sus hijos, y ella era tan hermosa, tan buena madre". Griffith tiene un recuerdo algo diferente de la primera vez que vio a Antonio, y no precisamente agradable. "Lo primero que me preguntó fue mi edad", recuerda. "Yo le dije: 'Eso es lo más grosero que nadie me ha preguntado nada más conocerme'. Pero había algo en él. Todavía lo hay".