Las cuentas municipales abren otra guerra entre la Junta y el PP

Javier Arenas quiso ayer templar el embate del día anterior de su secretario general, Antonio Sanz, quien había extendido un enorme velo de sospechas sobre las cuentas públicas de los Ayuntamientos hasta ahora gobernados por el PSOE, con acusaciones de irregularidades, abusos y decisiones fuera de la ley. En un acto de su partido, el líder del PP habló de traspaso "tranquilo, sosegado, sin revanchas y resentimientos", pero -una vez suavizada la imagen de ataque sin cuartel- volvió a desplegar el velo: "Yo no soy partidario de exagerar y sí de que se conozca la verdad. Se tiene que saber cómo estas las cuentas y tenemos la obligación de contarles a los ciudadanos la verdad".

La alerta del PP sobre el descontrol del dinero y la limpieza del tránsito del poder en las instituciones tras las elecciones del 22 de mayo tuvo una severa respuesta por parte del Gobierno andaluz. La portavoz y consejera de la Presidencia, Mar Moreno, denunció una estrategia "irresponsable" de los populares para sembrar la desconfianza y empujar "la economía al precipicio", en un momento de especial dificultad para Andalucía y España.

Moreno: "Nunca pensamos que pudieran llegar a tanto"

"Nunca pensamos que pudieran llegar a tanto con una táctica tan obscena", sentenció la socialista, al tiempo que reprochó a Arenas que con una mano ofrezca diálogo y con la otra se dedique a "desprestigiar" y "desacreditar" las finanzas públicas.

Moreno agregó que, en cualquier caso, el Gobierno andaluz no se va a conducir en función de la estrategia del PP, y sería un error que este partido pretendiera usar los Ayuntamientos donde ha ganado contra la Junta. "Para eso no le ha votado la gente", dijo. También aclaró que el Ejecutivo de José Antonio Griñán rechaza adoptar una actitud a la defensiva con los municipios gestionados por el PP: "No contemplamos un escenario de combate político, sino de colaboración con los ciudadanos".

Respecto al compromiso de Javier Arenas de que los Ayuntamientos populares descartan impulsar planes de regulación de empleo (ERE) -aunque con un margen de un 5% de cautela hasta conocer en profundidad el estado de las cuentas- Mar Moreno se decantó por la ironía. "Espero que Arenas cumpla esta promesa más allá de marzo de 2012 [fecha prevista para las elecciones autonómicas] y no espere hasta entonces para que sus alcaldes se remanguen y hagan lo que ahora mismo no confiesan que van a hacer", señaló.

En unas jornadas del PP sobre política municipal, Javier Arenas conminó a los suyos a ganarse el respeto de los ciudadanos con iniciativas de sentido común y dejando en manos de los funcionarios la gestión diaria de los Consistorios. "Es una de las claves para salir de la crisis: nosotros marcamos las grandes líneas y que los funcionarios se sientan útiles", dijo.

Vinculó la obligación de decir la verdad sobre la economía de los Ayuntamientos a los planes de austeridad porque "el gasto público no aguanta". "Algunos me decíais hace unos minutos: 'Hijo mío, no tengo con qué pagar las nóminas (risas)'; Pero yo os digo que vamos a salir adelante con esperanza. Los brotes de confianza se traducirán en consumo y esto en una mejora de la actividad económica".

En ningún momento pronunció la palabra "recorte", solo "austeridad" que, en su opinión, además de una exigencia económica, es "una exigencia moral".

En cuanto a los futuros gobiernos municipales que tomarán posesión el sábado próximo, el líder del PP andaluz apostó por las mayorías estables en lugar de las "minorías mayoritarias". Según él, los populares están dando ejemplo de diálogo hablando con todos los partidos.