Morera busca espacio electoral a costa del descontento socialista

Las encuestas dicen que no, que el Ayuntamiento de Valencia queda lejos; que para las Cortes faltan unos centímetros y que la marca falla, que resulta un tanto extraña. Pero da igual. Compromís celebró ayer el acto central de la campaña electoral en Valencia ante más de un millar de simpatizantes y militantes en el Palacio de Congresos de la capital. Sus líderes, con Enric Morera y Mònica Oltra a la cabeza, predicaron con destreza y pasión y los aplausos resbalaron fácilmente de una audiencia entregada. Morera, candidato a la presidencia de la Generalitat, empleó buena parte de su tiempo en distanciarse del ideario socialista. "Nosotros trabajamos en la calle, mientras unos andan en sus grandes juergas; y otros, en sus brotes verdes", criticó. Y más aún, "la gente, por el mismo precio, compra al PP antes que al PSOE".

La formación nacionalista invita a los socialistas Mata y Noguera a sumarse

El acto empezó pasadas las 11.30. Medio centenar de militantes de Compromís arropaban a sus diputados y candidatos en el escenario. Mireia Mollà, cabeza de lista a las Cortes por Alicante, fue de las primeras en hablar. Tras unas tímidas primeras frases, Mollà cargó con dureza contra el modelo productivo causante del "paro y el despilfarro" que sufre la Comunidad. "El cambio es necesario, pero el recambio no es garantía", apuntó en referencia a los socialistas.

En Compromís se da un fenómeno curioso. Así como otras formaciones luchan por ofrecer una imagen compacta y un ideario sin fisuras, muchas veces abstracto, Compromís apuesta por vincular propuestas concretas a candidatos. Mollà, por ejemplo, aparecía en uno de los vídeos que se proyectaron ayer como la defensora de una ley que cancele la hipoteca una vez que el banco se quede con la vivienda del hipotecado. Ribó y Morera también unieron su discurso a propuestas claras para el electorado.

El líder de Compromís, que habló el último, agradeció a los militantes su esfuerzo estas semanas de campaña e insistió en el "bipartidismo pactado" entre el PP y el PSPV. Además, criticó que los socialistas hayan dejado fuera de las listas de las Cortes a los "mejores" e invitó a los que no repiten, caso de Manuel Mata o Ana Noguera a "unirse" al proyecto de Compromís.

Mònica Oltra, quizá la más poderosa, se dirigió en castellano a los suyos y habló de un país, la Comunidad, "con un cuerpo y dos almas". "Ellos piensan en grandes edificios y nosotros en grandes hospitales", concretó, "alimentan el fracaso escolar, ahogan a músicos y actores, roban las esperanzas a miles de jóvenes y desvían el dinero de la solidaridad".

Ribó, ovacionado, dio la bienvenida a los asistentes a la que "queremos que sea la capital de L'Horta". El exdirigente de Esquerra Unida explicó: "Quiero que la gente sepa qué somos y qué queremos, cual es nuestro modelo de valencianismo para todos, los que vinieron de Castilla y del Ecuador; nuestra idea de multiculturalidad, basada en la defensa de nuestra lengua y territorio, pero también en los que viene de fuera. Valencianismo sí, pero de integración", concluyó.

A las 14.00, tras los vítores finales, todos comentaban sus posibilidades en el pasillo. El 5% de los votos, porcentaje mínimo para entrar en las Cortes, ya no parecía tan lejano, sino algo posible, a pocos centímetros.