Pedro Vidal, la mano derecha de Hollywood

Huir del franquismo y convertirse en el primer ayudante de dirección español que trabajó con cineastas de la talla de Orson Welles, David Lean o Joseph Mankiewicz. Pasar los días al lado de Rita Hayworth, Sarah Miles, Brigitte Bardot o Ava Gardner, fumar porros con Robert Mitchum o conseguir 1.500 ratas para un rodaje en Sevilla.

En la vida de Pedro Perico Vidal hubo muchísimo de todo, hazañas, gamberradas y, sobre todo, decenas de películas. Vidal, que fue el ayudante de dirección en producciones como Lawrence de Arabia, Doctor Zhivago o La hija de Ryan, falleció por un infarto el pasado domingo a los 84 años y fue incinerado ayer en Pozuelo de Alarcón (Madrid).

Nacido en París, Perico contó hace una década en una entrevista con EL PAÍS haberse "envenenado del cine" cuando tenía 28 años. Por entonces ya había vivido en Barcelona y en Madrid, hasta que un día decidió dejar la carrera de Derecho e irse a Cannes. Escribía crónicas cinematográficas, "no críticas, porque eso siempre implica algo de mala leche, de frustración". Allí conoció a Orson Welles, del que se hizo amigo. Una noche le dijo: "Voy a rodar Mr. Arkadin, ¿quieres ser mi assistant?". "No conozco la técnica", respondió Vidal, a lo que Welles replicó: "Es muy fácil. Si eres muy estúpido tardas 15 minutos en aprenderla; si eres normal, 10".

Fue el ayudante de dirección de 'Doctor Zhivago' y 'Lawrence de Arabia'

Así empezó a trabajar, y a codearse con estrellas de Hollywood. Cary Grant, Sofía Loren, Stanley Kramer... Hizo buenas migas con Frank Sinatra y con Ava Gardner. Cuando esta viajó a España, la pareja se acababa de separar. "Se llevaban como el perro y el gato... En el hotel El Escorial tirábamos las sillas a una foto de Franco, nos jugábamos la cárcel cada noche... Luego me llevó a Los Ángeles, y me presentó a todo el mundo, incluso a Kennedy". Con ella, contó, se cogió la gran borrachera de su vida. Tras varios dry martinis y cócteles "a las doce de la mañana, llegamos a casa y dice: '¿Sabes qué tenemos que hacer ahora?'. Yo pensé que iba a decir "follar", pero dice: 'Jugar al tenis".

Tras dejar la dirección, Vidal fue guionista ["como negro"] produjo algunas películas, por ejemplo Cuatro cabalgan ["Malísima. Es que esta profesión siempre se mueve entre lo cutre y lo sublime"]. Recientemente intervino en el documental de Isaki Lacuesta La noche que no acaba, una producción basada en el libro de Marcos Ordóñez Beberse la vida: Ava Gardner en España y presentado el pasado septiembre en el Festival de San Sebastián. La última película que hizo, según contó su hija, Alana, a Efe, fue hace dos años en Estados Unidos, donde rodó I love Miami.