Arteleku inicia una nueva etapa de debate y reflexión sobre el arte contemporáneo

El centro donostiarra reabre sus puertas el día 21 tras la reforma de sus instalaciones

El Centro de Cultura y Arte Contemporáneo de San Sebastián, Arteleku, inicia el próximo día 21 una nueva etapa que lo inserta de lleno en el debate y la reflexión sobre la cultura contemporánea. Ese día reabrirá sus puertas tras la reforma integral de sus instalaciones en el barrio de Loiola. En el nuevo Arteleku, emblema de la creación en Euskadi, conviven la tradición y la vanguardia; los talleres de hierro o madera con equipamientos multimedia. El centro trata de responder a la evolución del panorama artístico, muy influido por la globalización y las nuevas tecnologías.

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El Centro de Cultura y Arte Contemporáneo de San Sebastián, Arteleku, inicia el próximo día 21 una nueva etapa que lo inserta de lleno en el debate y la reflexión sobre la cultura contemporánea. Ese día reabrirá sus puertas tras la reforma integral de sus instalaciones en el barrio de Loiola. En el nuevo Arteleku, emblema de la creación en Euskadi, conviven la tradición y la vanguardia; los talleres de hierro o madera con equipamientos multimedia. El centro trata de responder a la evolución del panorama artístico, muy influido por la globalización y las nuevas tecnologías.

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El centro, dependiente de la Diputación Foral de Guipúzcoa, ha sido desde su inauguración hace 15 años la cocina del arte en el País Vasco. O como acostumbra a decir su director, Santi Eraso, ha supuesto para el arte 'lo que los laboratorios a la industria farmacéutica'. Inicialmente, se creó a imagen y semejanza de las facultades de Bellas Artes, pero su propia condición de centro de producción le obligó desde el principio a alejarse de la concepción del arte como compartimentos estancos y a evolucionar junto a sus usuarios.

Hace ya unos años, los responsables de Arteleku entendieron que la globalización, la extensión de las nuevas tecnologías y la desaparición de límites entre las diferentes disciplinas artísticas habían propiciado un cambio tal en el panorama artístico que exigía la redefinición del centro y la reforma de sus instalaciones.

El nuevo edificio, con cerca de 5.000 metros cuadrados, trata de responder a este triple reto; resuelve, según Eraso, 'problemas de funcionamiento interno' que existían antes de la rehabilitación, y localiza todos los servicios en la planta baja, de tal forma que se liberan el primero y el segundo piso para el uso de artistas y colectivos.

El equipo de arquitectos BGM ha mantenido prácticamente intacta la fachada industrial de Arteleku y se ha centrado en la transformación de la estructura interna del edificio y de su patio trasero. Los diferentes espacios de la planta baja, con gran luminosidad, están conectados visualmente por divisiones acristaladas. Allí se encuentran los despachos de administración, la biblioteca y mediateca -con más de 20.000 volúmenes-; los talleres multimedia, un pequeño plató multifuncional, una gran sala de exposiciones y espectáculos y un salón de actos que puede aumentar su aforo a través de un tabique móvil. Los talleres tradicionales, de madera, metal y gráfica, se sitúan ahora en unos pabellones construidos en el exterior del edificio.

Arteleku, cada vez más entregado a las coproducciones, estrenará oficialmente su renovado edificio el 21 de junio. Pero los artistas que participan en Mugatxoan -un programa internacional en el que caben todas las propuestas de hibridación de la danza- ya han tomado sus instalaciones.

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