Un escritor prolífico y polifacético
Hace 25 años, Francisco Umbral ganó el Premio Nadal con Las ninfas, una novela de adolescencia. Gustó. Pero lo que realmente impactó en aquel 1975 fue Mortal y rosa: una prosa magnífica y un relato sobrecogedor escrito a raíz de la enfermedad y muerte de su hijo. Llevaba más de 10 años escribiendo (Tamouré es de 1965), pero este libro es definitivo en la extensa bibliografía del escritor.Umbral nos desborda; suele publicar más de un libro por año; algunos, dos, y otros, tres, y además del columnismo, su pasión diaria, cultiva todos los géneros: la narrativa, el ensayo, mem...
Hace 25 años, Francisco Umbral ganó el Premio Nadal con Las ninfas, una novela de adolescencia. Gustó. Pero lo que realmente impactó en aquel 1975 fue Mortal y rosa: una prosa magnífica y un relato sobrecogedor escrito a raíz de la enfermedad y muerte de su hijo. Llevaba más de 10 años escribiendo (Tamouré es de 1965), pero este libro es definitivo en la extensa bibliografía del escritor.Umbral nos desborda; suele publicar más de un libro por año; algunos, dos, y otros, tres, y además del columnismo, su pasión diaria, cultiva todos los géneros: la narrativa, el ensayo, memorias, biografías, incluso ha probado el teatro (Cabaré político). Los autores y la literatura son uno de sus temas preferidos: Larra, anatomía de un dandi, Lorca, poeta maldito, Valle-Inclán. Los botines de piqué, o más ensayística, y a veces polémica, como Las palabras de la tribu.
Otro de sus temas, en clave novelística, es la historia reciente de España: Y Tierno Galván ascendió a los cielos, Madrid, 1940. Memorias de un joven fascista, Capital del dolor, La forja de un ladrón o La leyenda del César visionario. De su obra memorialística sigue destacando Trilogía de Madrid.