La vacuna, una solución a largo plazo

Cuando la epidemia del sida ha alcanzado niveles tan trágicos como los que sufre el África subsahariana, la única receta para hallar una solución a largo plazo es educación y, quizá, una vacuna, aunque sea poco efectiva. Así lo expresó ayer el epidemiólogo de la Universidad de Oxford Roy M. Anderson. "Quizá para la vacuna del sida, difícil de elaborar debido a la rápida evolución del virus, tengamos que bajar el listón. En Estados Unidos y en Europa no se permiten vacunas que superen el 60% de eficacia. Probablemente para el sida tengamos que conformarnos con una eficacia de apenas el 30%", di...

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Cuando la epidemia del sida ha alcanzado niveles tan trágicos como los que sufre el África subsahariana, la única receta para hallar una solución a largo plazo es educación y, quizá, una vacuna, aunque sea poco efectiva. Así lo expresó ayer el epidemiólogo de la Universidad de Oxford Roy M. Anderson. "Quizá para la vacuna del sida, difícil de elaborar debido a la rápida evolución del virus, tengamos que bajar el listón. En Estados Unidos y en Europa no se permiten vacunas que superen el 60% de eficacia. Probablemente para el sida tengamos que conformarnos con una eficacia de apenas el 30%", dijo.Anderson describió los éxitos logrados en los países ricos gracias a los medicamentos y a la prevención (citó por cierto a España y ciertas áreas urbanas de Estados Unidos donde los avances no han sido tan espectaculares), pero también sembró una cierta duda en esta conferencia al plantear si los resultados obtenidos en los enfermos de sida se deben sólo y exclusivamente a los tratamientos o también forman parte de la evolución natural de la enfermedad.

La postura de Anderson de reducir sus expectativas ante los medicamentos y la eventual vacuna es un sentimiento general que se ha empezado a respirar en esta reunión. Así lo creen los virólogos españoles especialistas en sida Rafael de Andrés y Rafael Nájera."La intervención de David Ho ha sido clara. Ahora ha tenido que reconocer que el virus no desaparece en absoluto, idea que se llegó a acariciar. Ahora no queda más remedio que reconocer que el tratamiento farmacológico es para toda la vida. Por eso lo que hay que estudiar son las interrupciones programadas, para decidir en qué momento son más efectivas y cómo hay que hacerlas. La recombinación del virus está complicando la investigación enormemente. Hay cepas nuevas."

Los investigadores presentan en este foro trabajos tremendamente concretos que buscan, al menos, mejorar la calidad de vida de los enfermos. Es el caso del estudio liderado por Cliford Lane, director clínico de enfermedades infecciosas de los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos. Lane lleva años estudiando las posibilidades de la interleukina-2 para restablecer el sistema inmunológico de los enfermos que ya están tratados con los antirretrovirales y ha traído a Durban datos preliminares sobre los resultados obtenidos. "Se ha encontrado incluso una pequeña pero significativa disminución de la carga viral (el número de VIH encontrados en sangre)", dijo Lane. En estas investigaciones colaboran dos médicos españoles, Eduardo Fernández-Cruz y Juan Carlos López Bernaldo de Quirós, ambos del hospital Gregorio Marañón.

El estadounidense John A. Bartlett, del centro universitario de Duke, ha presentado también los nuevos tratamientos disponibles: los fármacos lopinavir y T20 y una nueva combinación de medicinas a base de AZT, 3TC y abacavir.

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